Durante el encuentro "Observatorio covid-19 ANIS: "Vacunas frente a covid-19, ¿qué, cómo, cuándo y para quién?", la directora de la Agencia Española de Medicamentos (Aemps), María Jesús Lamas se ha mostrado reticente a ofrecer una fecha para la disponibilidad de una vacuna contra el nuevo patógeno, argumentando que la ingente publicación de informaciones al respecto “puede crear falsas expectativas”.
Pese a ello, en comparecencias ante los medios, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha dicho que la vacuna del consorcio en el que participa la Universidad de Oxford estaría disponible antes de acabar el año; Pedro Sánchez dijo lo mismo pero, ya entrado noviembre, ha prometido que a la altura de mayo habrá campaña de vacunación frente al nuevo coronavirus.
En sus intervenciones en encuentros científicos y con los medios de comunicación, los virólogos e inmunólogos citan con frecuencia el final de 2021 como fecha para la inmunización de la población general: cuando la producción sea suficiente para una vacunación masiva y los grupos de riesgo ya hayan sido inmunizados, todo eso con datos de eficacia y seguridad favorables con los ensayos clínicos terminados.
Es mucho más difícil extraer de los científicos una estimación sobre cuándo la vacuna permitirá vivir en condiciones previas a la pandemia. Explican que hay demasiadas variables: nivel de efectividad, alcance de las campañas de vacunación, ritmo de producción y distribución, entre otras.
A una pregunta sobre la vacuna de la compañía Pfizer, que ha ganado notoriedad esta semana con la publicación de un análisis preliminar de resultados en fase III, Lamas los calificaba de “esperanzadores” pero de nuevo se decantaba por la cautela hasta que se disponga de un análisis final: “Los estudios se diseñan de una forma muy concreta, hay que esperar a que concluya el ensayo clínico y conocer el rango de efectividad en población general”.
¿Vacunación obligatoria?
Lamas negaba tener autoridad para opinar sobre medidas de salud pública, como la obligatoriedad de vacunarse, que tampoco fue la opción preferida de los demás participantes en el encuentro.
Sin embargo, sí considera probable que el certificado de vacunación sea exigible para la realización de viajes o en otras circunstancias. También considera importante la creación de un registro de vacunación.
Tanto la viróloga Sonia Zúñiga (CSIC) como el sociólogo Rafael Serrano (CSIC) se mostraban partidarios de abordar la necesidad de vacunarse partiendo de la información y la formación.
Seguridad, por delante
Como en otras ocasiones, Lamas ha declarado que la prisa por disponer de una vacuna no va a ir en detrimento del rigor en el análisis de sus resultados, con un seguimiento que se prolongará tras la aprobación para registrar resultados en vida real.
Ante quienes expresan reticencias a vacunarse, indicaba que la vacuna de Johnson & Johnson recopila datos que parten de una plataforma anterior en la cual hay información de 100.000 personas, y estima que las vacunas que están investigándose habrán sido evaluadas en una población de voluntarios que probablemente oscilará entre los 60.000 y los 100.000 sujetos como mínimo.
A pesar de todo, considera que la actual campaña de vacunación de la gripe estacional, en la cual se ha documentado un incremento de cobertura del 30%, ofrece un indicio de que la población confía en las vacunas.
Nicolas Gonzalez Casares: