El nuevo consejero de Salud, Manel Balcells, nombrado este pasado domingo tiene ya una importante tarea por parte de los sindicatos de profesionales sanitarios para abordar en su nuevo cargo. El mensaje es prácticamente unánime por parte de todos los agentes sociales que le piden la mejora "urgente" de las condiciones laborales y retributivas de los facultativos.
Balcells llega a la consejería de Salud catalana despés de la renuncia del anterior consejero Josep María Argimon, que presentó su renuncia el pasado viernes junto al resto de consejeros de Junts tras consumarse la ruptura con sus socios de Gobierno, ERC. El nombramiento de Balcells, por parte del presidente Pere Aragonès este mismo domingo, abre una nueva etapa en la consejería catalana, que ha sido recibida con un mensaje casi unánime por parte de los sindicatos. El sistema tiene que asumir importantes reformas y el consejero “no tiene tiempo que perder”.
Desde Metges de Catalunya (MC) se reclama al nuevo consejero, que sitúe entre sus prioridades la mejora "inmediata" de las condiciones laborales y retributivas del personal facultativo para "empezar a resolver la crisis de profesionales que sufre el sistema" y para “recuperar la capacidad de retención y atracción del talento médico hacia la sanidad pública”.
Este sindicato, mayoritario indica a Balcells que “no hay tiempo que perder” si se quiere evitar la conflictividad y el inicio cercano de movilizaciones que ya exigen unos profesionales médicos “agotados, hartos y con un grado de malestar muy elevado”.
Desde la enfermería, SATSE ha destacado la experiencia como sanitario, lo cual “le capacita de primera mano para conocer los problemas de sistema sanitario catalán”, y tienden su mano para trabajar para formular nuevas políticas que mejoren la situación.
Los sindicatos plantean al consejero una “reversión” del inmovilismo en políticas de personal y una apuesta decidida por los profesionales sanitarios.
Nicolas Gonzalez Casares: