Con mensajes de apoyo por parte de las entidades y representantes profesionales de los trabajadores de las oficinas de farmacia de todo el país ha concluido el pasado martes la primera jornada de huelga que se convoca en las oficinas de farmacia de Vizcayas en los últimos 38 años. El próximo martes, se llevará a cabo el próximo paro.
Si en 1982 el problema se centró en determinadas condiciones laborales, ahora en 2022, a las cuestiones económicas se unen otras vinculadas no sólo al ámbito económico, “sino que van más allá”, según explica en las redes sociales Ricardo Blanco, secretario general de Afrassebi (Asociación de Farmacéuticos, Regentes, Adjuntos, Sustitutos y sin Ejercicio de Bizkaia), entidad convocante del paro.
La asociación advierte, que estos paros, tanto el del pasado martes, como el próximo, son las movilizaciones “más laxas previstas”. Si la patronal no atiende sus demandas valoran convocar nuevos paros.
En total han sido 1.600 trabajadores están llamados a la huelga. De ellos, una parte participó en la manifestación que recorrió el martes parte del centro de Bilbao, bajo el lema de una gran pancarta con la leyenda ‘Por un convenio justo'.
El eje de la demanda está en primer lugar en una mejora de los salarios. Según asegura Blanco, un licenciado en farmacia cobra de base 1.500 euros al mes, una cantidad que se reduce considerablemente en el caso de los técnicos auxiliares. Además también se pide la reducción de las jornadas de 1.760 horas anuales y la revisión del complemento de nocturnidad, fijado actualmente en 0,82 euros por hora.
Blanco recuerda que estos trabajadores “han dado el 250%” en la pandemia y asegura que “la farmacia puede y debe dar más”.
La actuación de esta primera huelga ha sido apoyada por diversas asociaciones de trabajadores de farmacia en España, como es el caso de FEFANE, la Federación de Farmacéuticos No Empresarios a nivel nacional, que en las redes sociales, además de aplaudir la iniciativa, publicaban un tuit en el que se preguntaban qué podría pasar si el movimiento se extendiera al resto del país.
Por su parte, desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Vizcaya, que representa tanto a los profesionales empresarios, como a los trabajadores se ha declinado realizar valoraciones sobre la huelga, indicando que esta es una cuestión empresarial y que el Colegio “representa a todos los profesionales”. Igualmente han garantizado que el servicio de las farmacias vizcaínas está garantizado. La patronal, Profabri, por su parte, hasta el momento no ha presentado su valoración oficial, si bien considera que la huelga apenas ha tenido seguimiento y que actualmente se está negociando un incremento del sueldo de más del 8% para el periodo 2021-24.
Nicolas Gonzalez Casares: