El Departamento de Salud de Cataluña ha hecho públicos los datos de la Encuesta de Salud 2015, que cuenta con un apartado específico sobre el consumo de medicamentos en esta comunidad autónoma. Destaca el hecho de que, entre los mayores de 15 años que ha consumido algún medicamento en los dos días previos a la entrevista, "el porcentaje es más bajo entre las personas de la clase más acomodada y entre las que tienen estudios universitarios".
Así, si se tiene en cuenta la clasificación del Departamento de Salud, que divide a la población en Clase I, II y III, habría que señalar que sólo el 53,8% de los primeros habría tomado una medicina en los dos días previos, mientras que la cifra sube al 62,8% en el caso de los terceros. Más significativa aún es la diferencia en función de los estudios cursados. Casi el 78,7% de los encuestados con estudios primarios había consumido algún medicamento, frente al 47,8% de los que contaban con estudios universitarios.
En términos generales, la encuesta concluye que el 60,3% de la población mayor de 15 años habría consumido algún fármaco durante los dos días anteriores a la encuesta, un porcentaje que aumenta con la edad y también por sexos, ya que la cifra en mujeres fue del 66,0% y del 54,3% en hombres. En cuanto a los menores, el 22,9% de los niños de 0 a 14 años habrían tomado algún fármaco.
Los medicamentos más consumidos
Los productos más usados entre los adultos serían la aspirina o similares para aliviar el dolor y los antiinflamatorios (26,0%), seguidos de los fármacos para la hipertensión arterial (18,9%) y para el control del colesterol (13,2%). Sorprende además que más del 10% habría declarado el uso de tranquilizantes, inductores al sueño y antidepresivos. Entre los menores de 15 años, serían también los analgésicos y antiinflamatorios (8,2%), seguidos de los productos para la tos o el resfriado (5,8%) y los que van dirigidos a las alergias crónicas (3,2%).
En general, si se comparan los últimos cinco años, la tendencia del consumo de medicamentos, tanto en población adulta como infantil, sería "decreciente". Para entender esta valoración del Departamento de Salud habría que contraponer el 62,8% de los adultos que habrían declarado el consumo de algún fármaco en los dos días previos a la encuesta en 2015 frente a casi el 80% que lo hicieron en 2010 y 2011.