El consejero de Salud de Cataluña, Antoni Comín, ha anunciado que el Departamento de Salud trabaja desde hace meses con los representantes de enfermería para disponer de una legislación propia en cuanto a la indicación de medicamentos por parte de estos profesionales.
Comín manifestó su apoyo a este colectivo, tras una reunión mantenida el viernes, 5 de febrero, con el Consejo de Colegios de Enfermeras y Enfermeros de Cataluña para abordar la situación en que se encuentra el personal de enfermería a raíz de la aprobación el pasado mes de diciembre el Real Decreto Real Decreto 954/2015,norma que, según la consejería catalana, “limita su capacidad de indicación y prescripción de medicamentos”.
El consejero explicó que ésta es una de las medidas que su Departamento va a llevar a cabo para “resolver con celeridad la situación de inseguridad jurídica” en que se encuentra el colectivo de enfermería, según se apunta desde la Consejería en un comunicado.
Por tanto, la intención es “disponer, lo antes posible, de un propio decreto catalán que regule la indicación autónoma y la prescripción colaborativa de medicamentos”. Con este objetivo, hace meses que se ha iniciado un proceso de diálogo entre el Departamento de Salud, el Consejo de Colegios de Enfermeras y otros representantes de estos profesionales, “para hacer realidad una normativa propia que servirá para protegerlos y para eliminar cualquier ambigüedad sobre su marco de actuación”.
Otra de las medidas anunciadas es la presentación por parte de la Consejería de un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Supremo contra el Real Decreto. Sin embargo, cabe destacar que la Sala Tercera de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo ha denegado la suspensión cautelar del artículo 3.2 del Real Decreto. Las dos entidades que componen la Mesa de la Profesión Enfermera (Consejo General de Enfermería y Sindicato de Enfermería, SATSE), en sendos recursos presentados ante el Supremo, habían solicitado la suspensión cautelar de ese artículo alegando el deterioro que está causando en la calidad de la atención a los pacientes, conflictos entre profesionales y restricción de las competencias que los enfermeros ostentan por ley.
Además, el Departamento de Salud de Cataluña manifestará en el próximo Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud su descontento por la manera de actuar del Ministerio de Sanidad en la tramitación del Real Decreto, “publicado un 23 de diciembre por un Gobierno en funciones y alterando un contenido que ya estaba consensuado con anterioridad en el propio Consejo”.
Por su parte, el Colegio de Médicos de Barcelona (COMB), en una actitud que contrasta con el enfrentamiento de la Organización Médica Colegial con los representantes de enfermería, ha defendido, en entrevista con Europa Press, que se reconozca legalmente que las enfermeras puedan indicar fármacos y que se regule su competencia en el ámbito de determinados productos relacionados con la actividad de enfermería. A pesar de esto, su presidente, Jaume Padrós, ha recordado que el diagnóstico, tratamiento y prescripción son competencias de los médicos, motivo por el que considera que es necesario encontrar otra fórmula para que enfermería pueda desarrollar sus funciones.
