Sigre ha presentado a las autoridades ambientales su informe anual de actividad 2021, en el que se recoge que cada ciudadano canario depositó en el Punto Sigre de la farmacia 80,16 gramos de envases vacíos o con restos de medicamentos. Esto supone un 5% más respecto al ejercicio anterior y un incremento de alrededor de 20 puntos en los últimos 5 años.
Asimismo, como entidad responsable de coordinar los Planes Empresariales de Prevención de envases del sector farmacéutico (PEP), Sigre ha presentado el Primer Informe de Seguimiento del PEP 2021-2022. Este documento recoge los esfuerzos realizados por la industria farmacéutica para conseguir minimizar el impacto ambiental de los envases de medicamentos, logrando así que sean cada vez más ecológicos y sostenibles, contribuyendo a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
En este sentido, el informe constata que, durante 2021, se aplicaron un total de 421 iniciativas de ecodiseño, que permitieron hacer más sostenible 117 millones de los envases puestos en el mercado. Además, se produjo un importante incremento en el número de compañías que aplicaron alguna iniciativa, lo que demuestra el creciente compromiso medioambiental de los laboratorios farmacéuticos con la economía circular.
Según desprende el último sondeo de opinión realizado por Sigre, el 91% de los canarios considera perjudicial para el medio ambiente tirar los medicamentos a la basura o por el desagüe. Además, un 97% asegura ser consciente de que el cuidado del medioambiente también es importante para cuidar de nuestra salud, lo que demuestra una creciente concienciación sobre la relación que existe entre el estado de nuestro entorno y la salud de las personas, lo que confluye en el concepto de One Health (Una sola salud).
Este sondeo, que analiza anualmente la actitud y el grado de concienciación ciudadana sobre el reciclado de los medicamentos, muestra también que el 86% de los hogares recicla medicamentos a través del Punto Sigre de la farmacia, una práctica en la que destaca el colectivo de personas mayores de 55 años (87%) y el de enfermos crónicos (80%).
Asimismo, con respecto al año anterior, aumentan los ciudadanos (56%) que son conscientes de que tirar residuos de antibióticos a la basura o por el desagüe es una mala práctica que contribuye al desarrollo y dispersión de las resistencias bacterianas.
El estudio recoge también la opinión de los farmacéuticos sobre el sistema de recogida de residuos de medicamentos, reflejando que 9 de cada 10 farmacéuticos consideran que su colaboración con SIGRE es una forma de mostrar a la sociedad su compromiso con el medioambiente.
De igual forma, el 90% de los farmacéuticos muestra una implicación activa en el funcionamiento del sistema, declarando que anima a sus clientes a depositar en el Punto Sigre los envases vacíos y con restos de medicamentos.