La Consejería de Salud del País Vasco ha anunciado la decisión del Consejo de Gobierno de autorizar una partida de 6,6 millones de euros para la concesión, durante 2018, de ayudas para garantizar la adherencia a los tratamientos farmacéuticos a aquellas personas que, por su situación de vulnerabilidad, no podrían hacer frente al coste añadido impuesto por el copago farmacéutico.
"Estas ayudas se enmarcan en la oposición mostrada en todo momento por el Gobierno Vasco al copago farmacéutico, un rechazo firme que propició que Euskadi fuera la primera comunidad del Estado que implementó medidas de compensación destinadas a pensionistas y grupos desfavorecidos, para garantizar que ninguna persona deje de tomar la medicación prescrita por motivos económicos", explican desde el Departamento que lidera Jon Darpón, promotor de la iniciativa.
Desde la Consejería han aprovechado además para hacer balance de los cinco años desde la implantación de las ayudas (calculan que se habrían concedido unas 400.000), que habrían supuesto un desembolso superior a los 25 millones de euros, a los que habría que añadir los 6,6 millones consignados en los presupuestos del 2018 (ampliables en caso de necesidad), cuyo gasto se acaba de autorizar.
En 2017, el montante destinado a las ayudas al copago ascendió a los 5,2 millones euros dirigidos a las personas beneficiarias de las 95.625 solicitudes atendidas. El primer plazo fue abonado ya por el Departamento de Salud del Gobierno Vasco a finales de julio de 2017, por un importe de 2,1 y en breve, aseguran, se va a iniciar el pago del segundo plazo.
Ayudas de hasta 823,34 euros
El importe de la ayuda media por persona habría ascendido a los 61,72 euros en 2017, siendo la más más cuantiosa de 824,34 euros. El 97,7% de los beneficiarios fueron pensionistas, mientras que el 2,3% restante fue a parara a personas en situación legal de desempleo que no perciban prestación por desempleo ni Renta de Garantía de Ingresos.
El Consejero de Salud, Jon Darpón, ha subrayado el hecho de que el esfuerzo realizado por el Gobierno Vasco para paliar los efectos del copago farmacéutico ha beneficiado a los sectores de la población vasca más vulnerables, remarcando que para su Departamento "la equidad en la salud es un principio irrenunciable, y por eso seguiremos trabajando para salvaguardar nuestro sistema sanitario y hacer el acceso a la salud un derecho de todas las personas".
