El gasto en medicamentos para la hepatitis C y el VIH ha registrado una importante reducción en los últimos años, a consecuencia de la competencia establecida por nuevas alternativas terapéuticas y la aparición de genéricos.
En concreto, en el caso de la hepatitis C, el tratamiento medio ha pasado de los 27.582 euros por paciente en 2014 a los 8.009 euros en 2018. Así se desprende de los datos provisionales publicados en la Memoria de 2018 del Servicio de Salud del País Vasco, Osakidetza.
En concreto, el organismo vasco señala que en 2018 ha invertido un total de 17,43 millones de euros para tratar a 2.177 pacientes, mientras que en 2014 se dedicaron 3,99 millones para 145 pacientes. De este modo, el gasto por paciente ha caído un 71%.
A este respecto también es relevante señalar que actualmente el gasto farmacéutico en hepatitis C alcanza el 0,62% del presupuesto total de Osakidetza.
Una situación similar a la de la hepatitis C se puede observar en el caso de los tratamientos para el VIH. En este caso, desde 2014 el número de pacientes en tratamiento se ha incrementado un 7,5%, pero el gasto total ha caído un 35,8%, desde los 35 a los 22,5 millones de euros. De este modo, la inversión por paciente ha pasado de 6.590 euros en 2014 a 3.937 euros en 2018, un 40,3% menos.
La reducción del gasto registrada ha hecho que el gasto en tratamientos antirretrovirales haya pasado de representar el 1,4% del presupuesto del Osakidetza en 2014 a un 0,8% en 2018.
Vacunas de la gripe
Otro ámbito en el que se ha visto una evolución similar es en la inversión en vacunas para gripe estacional. En 2014 el gasto medio por vacuna ascendió a 3,08 euros, mientras que en 2018 se quedó en 2,72 euros, un 11,8% menos. De este modo, el incremento de personas vacunadas en 2,1% se ha traducido en una reducción del gasto del 9,9%.
El este caso, actualmente las vacunas de la gripe suponen solo el 0,036% del gasto de Osakidetza, un 19,3% menos del 0,044% que suponía en 2014.