¿Tienes asma? Consejos desde la farmacia

El asma es una enfermedad crónica que afecta a los pulmones y a las vías respiratorias  produciendo una inflamación y un estrechamiento de los bronquios, lo que nos provoca falta de aire y nos dificulta la respiración. Esta sensación puede ser más o menos importante dependiendo de la sensibilidad del paciente, así como de la intensidad del estímulo o factor desencadenante del asma.

Los factores más comunes que pueden desencadenar un episodio asmático se pueden dividir en dos grandes grupos. En primer lugar, los alérgenos entre los que se encuentra el polen, los ácaros, el moho o los animales. Es importante, remarcar que los ácaros no sólo están en el polvo, sino que también podemos encontrarlos en mascotas o en algunos alimentos inclusive. 

Y,  en segundo lugar los irritantes, como por ejemplo, el humo del tabaco, la polución o productos químicos, por mencionar algunos de ellos. Para un mejor control y manejo del asma es aconsejable tomar las medidas necesarias para evitar cualquiera de los desencadenantes mencionados y acudir siempre a un alergólogo. 

Otra cosa, que está en nuestras manos, es consultar las previsiones de niveles de polen en nuestra región. Hay varias webs, como por ejemplo, polenes.com que facilita esta información actualizada. En cualquier caso, las personas no deberían fumar ni estar expuestas al humo de tabaco de otras personas, por todo ello, es muy importante que el paciente sepa identificar estos factores para poder incorporar y adaptar medidas de prevención, en cada caso. 

Es vital que el asma esté bien controlada para intentar eliminar o reducir el número y la intensidad de las crisis asmáticas, permitiendo así seguir una vida lo más normal posible. Es posible que una persona con asma no sufra los síntomas todos los días, pero no por ello debe ignorar la enfermedad. El asma necesitan un seguimiento diario, siendo la prevención uno de los aspectos esenciales en su abordaje y tratamiento. En los casos en los que el asma no está bien controlada las personas que lo sufren pueden llegar a ver limitada su calidad de vida, tanto a nivel personal como profesional, por eso es fundamental ponerse manos especialistas y no asumir que la enfermedad deba alterar tu vida

 Y, recuerda acude siempre al especialista y consulta a tu farmacéutico de confianza. Él te informará sobre esta cuestión y cualquier otra duda que tengas.

Recuerda, ante cualquier duda acude a tu farmacia y consulta a tu farmacéutico.