La desescalada del confinamiento se realizará de forma progresiva y teniendo en cuenta distintas herramientas que guíen a los técnicos para realizar la mejor propuesta al Gobierno.
Tal y como ha explicado María José Sierra, jefa de Área del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, en la rueda de prensa diaria sobre la evolución de la pandemia del covid-19, la desescalada tiene que tener en cuenta si se está produciendo propagación o no del virus, la situación del sistema sanitario y, por último, los niveles de inmunización de la población.
Con respecto al primero de los parámetros, Sierra ha explicado que es necesario analizar la capacidad y velocidad de transmisión como el número de reproducción básico (R0) para confirmar que la transmisión está en retroceso o casi nula.
Por otro lado, es necesario conocer la situación del sistema sanitario para determinar si puede ser capaz de afrontar en caso necesario un rebrote. Por ese motivo, hay que conocer "el impacto y la carga que supone para el sistema sanitario".
El último de los factores sería conocer el nivel de inmunización existente en la población española. Para conocerlo, el Ministerio de Sanidad junto con el Instituto Nacional de Estadística y las comunidades autónomas han diseñado un estudio para determinar el porcentaje de personas que ya han pasado la enfermedad. Se realizará un muestreo en 30.000 hogares y se obtendrán resultados en varias semanas. En la actualidad ya se ha diseñado el estudio y, en la actualidad "se está definiendo la parte logística" ha explicado la responsable del CCAES.
Todos estos elementos "conjuntamente nos ayudarán a tomas las decisiones del proceso de desescalada", ha señalado Sierra.
Junto a estas actuaciones, la responsable del CCAES ha señalado también que en esta fase, “lo importante de verdad es que los casos que tengan síntomas se aíslen”.