Aunque sigue existiendo diferencias entre países, estas son “mucho menores de lo que eran”. Así se ha referido el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, a los acercamientos que se están produciendo entre Estados, de cara a lograr el denominado acuerdo de pandemias, que busca unificar la prevención, preparación y respuesta que impidan los impactos sanitarios y sociales causados por el Covid.
El director del organismo internacional ha realizado estas declaraciones con motivo de la reunión que esta semana han mantenido los estados miembros para continuar sus negociaciones, dentro del Órgano Intergubernamental de Negociación (INB).
El objetivo fundamental del acuerdo, según ha explicado el director general es evitar lo ocurrido durante la pasada pandemia. El acuerdo, “es un pedazo de papel, pero la medida si vale la pena el papel en el que está escrito será si salva vidas y previene el sufrimiento de una futura pandemia”, ha señalado.
Esta reunión del INB, la novena que se realiza, se entiende como una oportunidad para que la elaboración de un acuerdo que satisfaga a todos. Fue a finales de 2021 cuando gobiernos y OMS se lanzaron esta iniciativa, cuya resolución tenía que alcanzarse precisamente para este mes de mayo.
Las dificultades para llegar a un consenso radican en la diferencia de intereses entre los países ricos y pobres, además de las propias dificultades que contiene un complejo acuerdo como este.
Las bases del acuerdo abordan diversas cuestiones que van desde la falta de sistemas de vigilancia y de prevención, hasta la hora de compartir datos y tecnologías de una forma equitativa. Igualmente desde algunos estados miembros se ha lanzado la idea de que un acuerdo de estas características podría incluso socavar su propia soberanía en materia sanitaria.
Nicolas Gonzalez Casares: