Los tribunales han dado la razón a las farmacias catalanas que, de forma conjunta, llevaron a cabo una segunda reclamación de intereses de demora por las facturas abonadas con retraso por parte del Servicio Catalán de Salud (CatSalut) en 2013 y 2014.
Ayer se dio a conocer la sentencia del Juzgado Contencioso Administrativo número 15 de Barcelona, según la cual la Administración catalana deberá abonar una cantidad aproximada de 9 millones de euros a los titulares de farmacia que se acogieron a la reclamación colectiva, realizada mediante el Consejo de Colegios de Farmacéuticos de Cataluña, correspondiente a las facturas de enero a abril y de septiembre del año 2013 y a la de marzo de 2014.
El cobro de este importe supondrá un respiro para las maltrechas economías de muchas farmacias, no obstante, a día de hoy no supone una solución, puesto que aún puede pasar tiempo hasta que la Generalitat abone dicha cantidad.
De hecho, el CatSalut dispone hasta el día 20 de noviembre para presentar un recurso de apelación contra dicha sentencia. Una vez ésta sea firme, se iniciarán los trámites de ejecución para obligar a la Administración a abonar la cantidad final.