El Consejo de Colegios de Farmacéuticos de Cataluña ha hecho balance de la campaña Mascareta /Salut, puesta en marcha en colaboración con el Departamento de Salud, la cual se ha saldado con el reparto de 9.252.043 mascarillas sanitarias de tejido de tres capas a través de la red de farmacias.
"La profesión farmacéutica ha realizado un esfuerzo extraordinario más allá del trabajo que ya realiza en su día a día, dando respuesta a una necesidad derivada del proceso gradual de levantamiento del confinamiento, en un momento en el que había baja disponibilidad de este producto", subrayan desde el Consejo.
La dispensación se ha realizado a través del sistema de receta electrónica del CatSalut, previa presentación por parte del usuario de la tarjeta sanitaria individual, lo que ha permitido que se haga de manera profesional, regulada y registrada, para poder adaptar la frecuencia de dispensación en función de la demanda.
Recuerdan, además, que la primera mascarilla gratuita fue cargo del Servicio Catalán de la Salud y las siguientes a 0,76 céntimos/unidad, precio fijado para la campaña por parte del Departamento de Salud sin que la distribución ni las oficinas de farmacia hayan tenido ningún margen de beneficio.
La campaña ha contado además con la colaboración de Hartmann, así como con las distribuidoras Fedefarma, Alliance Healthcare, Cofares y Hefame, así como un grupo de trabajo de la Cámara de Comercio de Barcelona.
La iniciativa ha estado acompañada por la difusión de un cartel con consejos sobre cómo hacer un buen uso de las mascarillas: cuándo utilizarlas, donde hay que tener presente que, en ningún caso, el uso de mascarilla sanitaria sustituye las principales medidas higiénicas, como el lavado de manos frecuente o taparse la boca y la nariz con la cara interna del codo o con pañuelos desechables si tosemos o estornudamos, así como las medidas de distanciamiento social; los siete pasos a seguir para hacer un uso correcto, y, finalmente, las características de la mascarilla que se ha entregado al usuario.