Profesión

"El descontrol en la administración de fármacos a animales no es bueno para nadie"

El presidente de la Asociación de farmacéuticos para el buen uso del medicamento animal (Asfarvet), Jairo Álvarez asegura que la capilaridad del modelo de farmacia imposibilita que se creen dificultades para dispensar medicación veterinaria
Vicente Jairo Álvarez, presidente de Asfarvet.

El presidente de la Asociación de farmacéuticos para el buen uso del medicamento animal (Asfarvet), el farmacéutico gallego Vicente Jairo Álvarez Fernández, muestra su disconformidad con las últimas manifestaciones de diferentes asociaciones y patronales veterinarias al respecto del cumplimiento del Real Decreto 666/2023, que regula la distribución, prescripción, dispensación y uso de los medicamentos veterinarios en España. Según explica Álavez, “la ley aumenta el control de la medicación veterinaria” porque estos profesionales ya tenían prohibida “la venta de medicamentos”.

“Todas las leyes del medicamento desde 1990 han establecido incompatibilidades entre prescriptor y dispensador. El veterinario nunca ha podido vender medicación. La ley solo permite ceder medicación en casos de urgencia”, apostilla Álvarez.

El presidente de Asfarvet es contundente a la hora de indicar que “la ley está para ser respetada y más aún cuando está en juego la salud pública”. “Las bacterias resistentes a los antibióticos representan un problema por el que todos los años mueren miles de personas en todo el mundo. En medicina humana ya hay un control total con ellos y, por ejemplo, ante una infección urinaria persistente se realiza un antibiograma antes de recetar un antibiótico de segunda línea”.

Sin embargo, los veterinarios pueden prescribir antibióticos de segunda línea sin necesidad de hacer antibiogramas, lo que resulta cuanto menos “chocante” al compararlo con la salud humana. “El descontrol en la administración de fármacos, particularmente de antibióticos para animales, no es bueno para nadie: no solo morirán mascotas, morirán personas”, abunda Álvarez.

En este sentido, el presidente de Asfarvet señala que el enfoque ‘Una sola salud’

recomienda que se trabaje de forma entrelazada la salud humana, animal y ambiental para evitar, por ejemplo, la proliferación de enfermedades zoonóticas o nuevas pandemias como la originada en 2020.

Por este motivo, a juicio de Vicente Jairo Álvarez, es “absolutamente normal que toda la farmacología que se prescriba desde la profesión veterinaria se registre administrativamente”. “Cada envase de antibióticos de uso humano que se dispensa está controlado por las autoridades sanitarias, en veterinaria tiene que pasar lo mismo”, argumenta el presidente de Asfarvet.

En su opinión, no hacerlo contribuirá a que siga aumentando lo que ya está empezando a ser un serio problema de salud pública: las resistencias a los antimicrobianos. En España, tal y como destaca Álvarez, fallecen unas 3.000 personas al año por mal uso de antibióticos, una cifra que a nivel mundial se disparará hasta los 10 millones de personas en 2050 si no se ataja el problema. 

Capilaridad 

La medicación para mascotas y otros animales solamente puede venderse en farmacias o comerciales veterinarias detallistas. “La ley es contundente al respecto”, abunda Álvarez. En España, la capilaridad del modelo de farmacia con más de 22.000 boticas distribuidas por toda la geografía imposibilita que se deje de dispensar medicación veterinaria “sea el día de la semana que sea, porque siempre hay oficinas farmacia de guardia”.

Todo el colectivo farmacéutico muestra, a juicio del presidente de Asfarvet, una postura común en torno a esta cuestión tal y como se desprende de comunicados hechos públicos desde la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), o se deriva de las recomendaciones del propio Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de España. “El RD 666/2023 debe ser respetado”, reitera.

Comentarios

guest
0 Comments
Inline Feedbacks
View all comments

Noticias relacionadas

Actividades destacadas