LUNES 27 de abril de 2015 (HealthDay News) -- El gobierno de Estados Unidos redujo el nivel de flúor que recomienda en el agua potable por primera vez en cincuenta años para prevenir el manchado en el esmalte dental que causa la sobreexposición al flúor.
El Departamento de Salud y Servicios Sociales de los Estados Unidos (U.S. Department of Health and Human Services, o HHS) anunció el lunes que el nivel óptimo de flúor en el agua potable para prevenir los problemas dentales debería ser de 0.7 miligramos de flúor por litro de agua.
Este nuevo nivel corresponde a la cifra más baja del rango de fluorización recomendado anteriormente de 0.7 a 1.2 miligramos por litro, que se estableció en 1962.
Expertos en materia de salud recomendaron el cambio puesto que hoy en día los estadounidenses tienen mayor acceso a otras fuentes de flúor como las pastas de dientes o los enjuagues bucales, del que tenían cuando los agentes municipales empezaron a añadir este mineral a las reservas de agua en Estados Unidos, de acuerdo con HHS.
Por lo tanto, más personas están expuesta a una sobredosis de flúor y sufren fluorosis dental; manchas blancas en el esmalte dental causadas por exceso de flúor.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (U.S. Centers for Disease Control and Prevention, o CDC) la fluorosis leve se manifiesta como puntos blancos, orillas escarchadas o líneas parecidas al gis en los dientes. En la fluorosis grave estas manchas blancas crecen y en casos extremos la superficie dental se vuelve áspera y picada.
Autoridades federales de salud señalaron que el nuevo nivel recomendado conservará los beneficios de la fluorización del agua y reducirá la incidencia de fluorosis dental.
“Aunque las fuentes suplementarias de flúor son mucho más comunes ahora que en 1962, seguimos teniendo la necesidad de fluorizar el agua”, dijo el contraalmirante Boris Lushniak, sub secretario de salud de los Estados Unidos. “La fluorización del agua comunitaria sigue reduciendo las caries en niños y adultos mucho más que si sólo se usa pasta de dientes y otros productos con flúor”.
Según el CDC aproximadamente tres de cada cuatro estadounidenses con acceso al sistema acuífero público reciben agua fluorizada.
La decisión de reducir las recomendaciones de fluorización del agua potable “no es gran cosa”, dijo el doctor Ronald Burakoff, jefe de medicina dental en el Sistema de Salud de North Shore-LIJ en Manhasset, Nueva York.
“Es un paso razonable porque se ha observado un incremento en casos de fluorosis”, dijo Burakoff. “Las autoridades federales sólo han reducido la cantidad de flúor que añaden; no han cambiado la creencia de que el flúor es benéfico”.
La nueva recomendación refleja toda la información acumulada sobre el nivel óptimo de fluorización en agua potable, dijo la doctora Gretchen Henson, directora del programa de educación avanzada en odontología pediátrica en el Departamento de Medicina Odontológica del Centro Médico Interfaith, Nueva York.
“El público no debería interpretar esta noticia como una recomendación de evitar el agua fluorizada”, dijo Henson. “El flúor en la cantidad correcta es muy importante para la salud dental. Vemos muchas más caries en niños que sólo toman agua embotellada o que viven en áreas donde no se fluoriza el agua”.
Gary Slade, profesor de ecología dental en la Escuela de Odontología de la Universidad de Carolina del Norte, dijo que quizá los expertos dentales y las autoridades de salud pública no estén de acuerdo en cada detalle de la recomendación, pero esta refleja un consenso basado en la evidencia disponible.
“Esto es sentido común en la salud pública puesto en práctica”, dijo Slade. “Necesitamos guías prácticas: aquí están y creo que son razonables”.
Los beneficios del flúor se observaron por primera vez en la década de 1930, cuando los odontólogos descubrieron que las caries eran menos frecuentes y menos graves para la gente cuyas fuentes de agua contenían niveles altos de flúor natural, dijo el CDC. Una investigación detallada determinó que el flúor se puede concentrar en la placa dental y la saliva para ayudar a prevenir el desgaste del esmalte dental.
En 1945, Grand Rapids, Michigan, se convirtió en la primera ciudad de Estados Unidos que añadiera flúor al sistema acuífero municipal.
El flúor aparece de manera natural en la mayoría de los sistemas acuíferos, pero generalmente con niveles tan bajos que no previenen las caries. Por ello la idea de añadir flúor al sistema acuífero de las comunidades ha crecido constantemente a lo largo de los años.
La fluorización del agua, a la que algunos se oponen por supuestos riesgos para la salud, ha llevado a una disminución importante tanto en la prevalencia como la gravedad de las caries según el CDC, quien nombró a esta práctica entre los 10 grandes avances de la salud pública en el siglo XX.
Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Ronald Burakoff, D.M.D., M.P.H., jefe de medicina dental, Sistema de Salud de North Shore-LIJ en Manhasset, Nueva York; Gretchen Henson, D.D.S., directora del programa de educación avanzada en odontología pediátrica, Departamento de Medicina Odontológica del Centro Médico Interfaith, Nueva York; Gary Slade, PhD, profesor de ecología dental, Escuela de Odontología Carolina del Norte, Chapel Hill, N.C.; comunicado de prensa, Departamento de Salud y Servicios Sociales de los Estados Unidos, 27 de abril de 2015