Según ha podido saber Diariofarma, los responsables del Sistema Español de Verificación de Medicamentos (Sevem) ya han enviado los pliegos con los requerimientos técnicos para la creación del repositorio nacional a un total de ocho proveedores tecnológicos, entre los que se encuentran Arvato, Aegate y Solidsoft (los acreditados por el EMVO para la implantación del sistema Blue Print), así como cinco operadores nacionales, entre ellos Indra. La adjudicación se prevé para enero-febrero, según han confirmado estas mismas fuentes.
Entre los requerimientos expresados a los operadores, se incluye la creación de un sistema para la gestión de los precios notificados, como ya se había adelantado. También la conexión del repositorio con Nodofarma, la plataforma que va crear el Consejo de COF para la interconexión de todas las farmacias españolas, lo cual plantea, a juicio de expertos consultados, un problema para la identificación, como establece la normativa europea, de la farmacia que se ha visto implicada en una incidencia. Será el Consejo de COF, en todo caso, el que tendrá que negociar con la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) el acceso a esa información.
Al parecer, ésta podría ser una de las cuestiones que tendrán que quedar definida en la normativa que todavía queda por desarrollar para definir las cuestiones técnicas relacionadas con la implantación del sistema de verificación en España. Junto a ella, está la de la conexión de la Aemps al repositorio para supervisar la actividad que tiene lugar en él e intervenir en casos de irregularidades. Según fuentes consultadas, en los pliegos sólo se alude a la necesidad de crear una interface para que la Agencia acceda, pero no se define qué va a poder ver a través de ella.
Varias vueltas
Con estas condiciones, y muchas más, sobre la mesa, los operadores tecnológicos tienen ahora hasta el 2 de diciembre para presentar sus propuestas, que serán valoradas por el Sevem en una primera vuelta en la que se realizarán los primeros descartes. La idea es continuar negociando después con los primeros seleccionados para proceder a la adjudicación final con base en la mejor propuesta desde el punto de vista técnico y económico, para la cual se aceptará la concurrencia conjunta de un operador Blue Print con uno nacional.
