El Colegio Oficial de Farmacéuticos (COF) de Zaragoza ha anunciado que, con motivo de la celebración, el pasado 20 de octubre, del Día Mundial de la Prueba del VIH, se va a poner en marcha una campaña, titulada 'Hazte la prueba. No lo dejes pasar' e impulsada por Omsida y las farmacias de Aragón, para promocionar el diagnóstico precoz del VIH.
En el marco de esta iniciativa, las farmacias distribuirán carteles y 35.000 folletos para informar sobre la prueba rápida del VIH y VHC (hepatitis C) entre las personas en riesgo de haber contraído la infección, y recordarán que el test, que se realiza en la Asociación Omsida de forma rápida, anónima, gratuita y confidencial, es un sencillo análisis de saliva que en 20 minutos confirma si la persona analizada es portadora de anticuerpos VIH y/o VHC.
En este sentido, desde el COF han precisado que el año pasado se realizaron un total de 481 pruebas de VIH a través de este método, casi un 40% más que el año anterior, y que 20 de estas pruebas resultaron positivas. A este respecto, añaden que, en Aragón, cerca del 40% de los pacientes con VIH tienen diagnósticos tardíos y por lo tanto acceden con retraso al tratamiento, lo que significa que mucha gente no se hace la prueba antes de aparecer los síntomas.
Teniendo en cuenta estos datos, recuerdan que la infección por VIH tiene actualmente una esperanza de vida similar a la de la población general, siempre y cuando el diagnóstico se obtenga en la etapa inicial de la infección. Sin embargo, el diagnóstico tardío puede suponer la reducción de la expectativa de supervivencia y un aumento de la mortalidad y morbilidad, además de un aumento del riesgo en la transmisión del VIH, ya que las personas seropositivas en tratamiento transmiten menos el VIH y está demostrado que reducen las conductas de riesgo.
En lo que respecta a las personas a las que se recomienda la realización de esta prueba, desde Omsida apuntan a las mujeres embarazadas o que planifiquen un embarazo; las personas que han padecido alguna infección de transmisión sexual, tuberculosis o hepatitis viral; las personas que tienen una pareja estable y quieren dejar de usar el preservativo con su pareja; las personas que hayan mantenido relaciones sexuales con penetración (anal o vaginal, y también oral si hubo eyaculación) sin preservativo con alguna persona con VIH o de la que se desconoce su seroestatus en relación al VIH, así como aquellos que hayan compartido material para inyectarse drogas.
Nicolas Gonzalez Casares: