Un farmacéutico y su hermano han sido detenidos por estafar 564.000 euros en un año al Servicio Catalán de Salud con la manipulación de recetas. La investigación comenzó en octubre, cuando el Departamento de Salud se detectó un posible fraude y lo trasladó a la policía.
Los investigadores han constatado que, desde septiembre de 2016, el farmacéutico de una botica de Reus falsificaba recetas que un médico preparaba para pacientes de una residencia geriátrica. Un local clandestino en Esplugues de Llobregat (Barcelona) le servía de apoyo para, con su hermano, falsificar las recetas y preparar los blísters con el Sistema Personalizado de Dosificación para los residentes de los centros sociosanitarios. Esto les permitía controlar todo el proceso de la receta, desde su emisión hasta la entrega de los medicamentos, y así modificar la cantidad de comprimidos, lo que les permitía obtener el margen de beneficio económico.
El dispositivo policial se puso en marcha el pasado 14 de noviembre, de forma coordinada con el Departamento de Salud, y se realizaron entradas a la farmacia, el domicilio del farmacéutico y el local. Durante el registro, se intervinieron 3.700 recetas del CatSalut, entre falsificadas y susceptibles de ser falsificadas, y miles de cupones precinto.
En la zona donde se preparaban los SPD, en deficientes condiciones higiénico-sanitarias, también se intervinieron más de 700 cajas de medicamentos caducados que estaban mezcladas con los no caducados. Por este motivo, también se investiga a los dos detenidos por la presunta comisión de un delito contra la salud pública.
Nicolas Gonzalez Casares: