La Ley de Farmacia de la Comunidad de Madrid quedó en el tintero en la legislatura anterior. Pese a ello, desde el gobierno regional siempre se ha apostado por aprobarla en esta legislatura, aunque ahora la convocatoria de elecciones autonómicas podría trastocar de nuevo los planes. Para hablar sobre este asunto y otros de interés, Diariofarma ha entrevistado a la directora general de Ordenación e Inspección madrileña, Elena Mantilla, en una cita cerrada previamente a la convocatoria de las elecciones.
Pregunta. Una de las iniciativas estrella de su dirección general es la Ley de Farmacia. Su tramitación, como es lógico se va a ver afectada por las elecciones del 4 de mayo. Suponiendo que ganara el PP, y continuara queriendo impulsar esta norma, ¿daría tiempo? ¿Cómo se verá afectada la norma?
Respuesta. A pesar del periodo electoral, la Consejería de Sanidad y esta Dirección General continúa trabajando con total normalidad. El equipo que está elaborando el borrador sigue trabajando con normalidad, igual que yo, como coordinadora. Estamos hablando de que las elecciones supondrán 2-4 meses de parón en la Asamblea de Madrid, pero sigo teniendo la intención de sacarla y aprobarla. Llevamos trabajando en ello desde septiembre de 2019.
P. ¿Daría tiempo?
R. Espero que sí. Eso dependerá de los plazos administrativos de la Asamblea, pero espero que sí. La intención es subir el borrador al Portal de Transparencia en cuanto sea posible.
P. ¿Qué aspectos son los que diferencian este nuevo proyecto con respecto al que se llevó a a la Asamblea en la legislatura anterior?
R. Hay tres novedades fundamentales. El texto es mucho más sencillo de entender y más ágil para que todos los ciudadanos lo puedan entender ya que hay leyes que son muy difíciles de entender. Vamos a dar más competencias a las oficinas de farmacia como profesional sanitario, aunque no puedo adelantar aún las novedades y, además, queremos recoger la entrega de medicamentos a domicilio, que ya se reguló con la pandemia en la Orden 442/2020. Estamos en un estudio avanzado jurídico para ver cómo articularlo en la Ley de Farmacia.
P. Uno de los problemas en la ley de la anterior legislatura fue por un problema de enfrentamiento de Enfermería con la farmacia…
R. Bueno, yo creo que fue un cúmulo de circunstancias. Estoy trabajando para que esto no pase y que rememos todos en la misma dirección. La administración está al servicio de los ciudadanos y estamos empezando a hablar con todos los agentes para ir en la misma dirección.
P. Ese todos, ¿incluye a Enfermería?
R. Sí, todos.
P. Uno de los problemas que pusieron los enfermeros en la legislatura anterior era que se hablara de farmacia asistencial. ¿Se nombrará esa cuestión en el nuevo proyecto?
R. Estamos todavía con un borrador que no es definitivo y hay temas que aún no están delimitados. Aún me tengo que sentar con muchos agentes y es posible que aún cambien cosas.
P. Ha comentado antes que quieren incorporar la dispensación domiciliaria a la Ley de Farmacia. ¿Qué balance hace de esta actividad durante el tiempo de pandemia?
R. Mejor imposible. No ha habido ni un error ni ninguna denuncia de hacerlo incorrecto. La Orden surgió porque tanto pacientes como farmacéuticos expresaban su temor de salir de casa para recoger su medicación. Fue una norma muy elaborada que buscaba velar por la seguridad del paciente, que es lo único que nos importa. Por ello queremos incluirla en la Ley de Farmacia.
“El balance de la dispensación domiciliaria es mejor imposible. No ha habido ni un error ni ninguna denuncia de hacerlo incorrecto” | “Veremos al final que los test de antígeno se pueden vender en las farmacias. ¿Por qué no se ha hecho desde el 4 de noviembre?”
P. ¿Puede dar algún detalle sobre si se ampliarán competencias en este aspecto?
R. Estamos mirándolo ya que hay que hilarlo muy bien a nivel jurídico. El sector farmacéutico está muy hiperregulado y no podemos saltar la ley estatal. Estamos viendo el encaje. Nuestra idea es, por lo menos, intentarlo. No sería en ningún caso una entrega a domicilio para todo ni todos, sino para personas vulnerables, dependientes, etc. Ya que no se puede desvirtuar esta actividad. Nosotros queremos utilizar al farmacéutico como el profesional sanitario que es, pero tenemos que encajarlo con la normativa estatal.
P. Una de las acusaciones que hace enfermería con respecto a la colaboración de las farmacias con el sistema sanitario es que se privatiza. ¿Cómo lo valora?
R. Lo he escuchado… No es que se privatice. Cuando das más servicios a través de oficinas de farmacia hay una cosa que está clarísima, es que vamos a dar más empleo. Con el borrador se lo vamos a explicar al colectivo de enfermería y estoy convencida de que quedará en un malentendido. Estoy segura de que esto será un beneficio para el ciudadano y eso es lo que hay que explicar.
P. ¿Cómo valora el papel de la farmacia durante la pandemia?
R. Impresionante. Desde el minuto uno, y estoy hablando del 4 de marzo de 2020, recibo una llamada del presidente del Colegio de Farmacéuticos de Madrid para ponerse a disposición de la Consejería para todo y de forma altruista. Los farmacéuticos se pusieron a disposición de esta dirección general para suplir el problema de las mascarillas y distribuirlas de forma gratuita a toda la población. Igual con los test de antígenos, que los farmacéuticos quisieron colaborar de forma altruista. La presidenta Ayuso dijo que los farmacéuticos eran unos héroes y yo que estoy trabajando con ellos lo veo ya que hemos estado trabajando día y noche para todas las colaboraciones, como la realización de los test de antígenos.
P. Ha dicho varias veces que la colaboración de los farmacéuticos con la Consejería ha sido altruista, pero ellos sí que han asumido gastos para llevar a cabo esas colaboraciones. Tiempo de trabajo, equipos de protección, etc… ¿No cree que sería necesario establecer una compensación por los trabajos realizados?
R. Durante el periodo de pandemia se tomaron decisiones en momentos absolutamente dramáticos y excepcionales, nos expresaron siempre su disposición a hacerlo de forma altruista.
P. Pero han asumido costes directos…
R. Yo no puedo entrar… no es de mi competencia.
P. ¿Hay algo más en lo que las farmacias podrían colaborar en el ámbito de la pandemia, como la vacunación ya que por ejemplo ellos mismos se han autovacunado?
R. Esto no entra tampoco en el ámbito de la inspección sanitaria. En lo que respecta a esta dirección general no pueden hacer más, ya lo han hecho todo.
P. Actualmente las farmacias están colaborando con la realización de test de antígeno de SARS-CoV2 en el marco de cribados. ¿Se puede ampliar esta colaboración?
R. Nosotros pedimos al Ministerio de Sanidad el pasado 4 de noviembre no solo la autorización para la realización de test sino también para la venta. Estamos avanzando en esta cuestión, pero es el Ministerio el que no lo ha autorizado pese a que lo hemos pedido en cuatro ocasiones tanto al Ministerio, a la Agencia Española de Medicamentos, la Comisión Europea… La Comisión nos indicó que compartía la política de la Comunidad de Madrid en cuanto a test masivos.
P. ¿Pero no se ha avanzado en ello?
R. No nos dejan, pese a que en muchos países se están vendiendo test de antígenos incluso en supermercados. En muchos otros asuntos que hemos puesto en marcha en la Comunidad de Madrid y que aquí nos decían que no, al final vieron que se hacía en otros países y se pusieron en marcha aquí. Veremos al final que los test de antígeno se pueden vender en las farmacias. ¿Por qué no se ha hecho desde el 4 de noviembre?
P. Otro tema que ha impulsado es la desburocratización y, en concreto, la simplificación del visado. ¿Por qué es importante avanzar en ello?
R. Nosotros auditamos las decisiones que se toman y para ello se tienen que transformar en métricas para ver si han funcionado. Por ejemplo, durante la pandemia se ha visto que la dispensación a domicilio ha funcionado a nivel social. La simplificación del visado también ha funcionado en términos social, de seguridad, de desburocratización y de gestión. Llevamos un año auditando si ha funcionado el visado automático de las recetas de pacientes crónicos, desde marzo de 2020, para quitar las trabas a que los pacientes accedieran a la medicación. Por ello, ahora hay dos posibilidades: seguir prorrogando un sistema temporal o volver a ese vestigio del pasado. Como hemos auditado qué ha pasado tanto sanitariamente como en relación con el gasto, sabemos que no ha habido influencia ya que se trata de medicamentos seguros y los pacientes crónicos no van a tomar más medicación de la que necesitan. Para seguir cumpliendo con la regulación estatal del visado, lo que hacemos es un visado por autocontrol.
P. Entonces, no se quita el visado…
R. No. Para los pacientes crónicos se visa por el inspector la primera vez ya que hay que comprobar que la medicación es la adecuada. A partir de ahí se visa por autocontrol, que está gestionado con un sistema informático que visa mediante algoritmos. En el momento en que cambie la situación del paciente salta una alarma al haberse establecido una auditoría. Otros medicamentos seguirán teniendo visado, por ejemplo, los de reproducción asistida. Lo importante es que eliminar esta burocracia va a suponer un antes y un después para los pacientes crónicos.
P. ¿Y cuándo se pondrá en marcha?
R. Estamos en pruebas todavía. Requiere de un trabajo enorme que están desarrollando 233 personas en la actualidad. Es un récord poderlo sacar en año y medio ya que al año se visan 600.000 recetas, por lo que hay que establecer los algoritmos adecuados para hacerlo posible.
“El papel de la farmacia durante la pandemia ha sido impresionante. Desde el minuto uno el COFM se puso a disposición de la Consejería para todo y de forma altruista” | “La presidenta Ayuso dijo que los farmacéuticos eran unos héroes y yo que estoy trabajando con ellos lo veo ya que hemos estado trabajando día y noche para todas las colaboraciones”
P. El presidente del Consejo General de COF, Jesús Aguilar, dice que en todo lo que participa la farmacia es garantía de éxito… [interrumpe]R. Sí, tiene razón … cree que a partir de lo aprendido con el covid-19, ¿en qué otras cuestiones cree que puede desarrollarse una mayor colaboración con la farmacia?
R. Yo considero al farmacéutico y su labor de apoyo esencial en la atención sanitaria a los pacientes durante la pandemia. Creo que ampliar las competencias de las oficinas de farmacia es uno de los grandes logros a obtener y yo voy a ayudarles a través de la Ley de Farmacia. Va a haber un antes y un después. También les vamos a echar una mano con la flexibilidad horaria, que es otra de sus reivindicaciones históricas.
P. ¿Qué cuestiones que tenía en marcha cree que se han podido ver afectadas tanto por el covid-19 como ahora por las elecciones?
R. La Ley de Farmacia ya que gran parte de mi equipo ha estado volcado en colaborar con el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) siempre que se le ha pedido. Pese a la pandemia, quiero dejar claro que los profesionales de esta dirección general nunca han dejado de trabajar ya que era importante que todos los centros sanitarios, incluyendo centros de estética, clínicas dentales, reproducción asistida, etc. estén en las condiciones para el ciudadano. En un momento de emergencia sanitaria, la inspección tiene que dar el do de pecho y asegurar que los 13.500 centros, más las 3.500 farmacias y los más de 600 desfibriladores automáticos que hay en la Comunidad de Madrid cumplan con los requisitos técnicos-sanitarios. A este respecto, quiero recordar que ahora el plan de inspección es trianual ya que así se hace más robusto.
P. ¿Pero se ha tenido que renunciar a algo?
R. No, aunque la pandemia nos ha trastocado los planes tanto profesionales como personales. Tengo un equipazo y pese a las demandas de colaboración del Sermas nunca nos hemos olvidado las inspecciones, que hay de 80 a 100 al día y es el trabajo principal de esta dirección general.
Nicolas Gonzalez Casares: