El consumo de antibióticos sigue limitándose cada vez más y desde 2016 el consumo total de antibióticos se redujo en un 32,4%, según los datos que ha presentado el informe anual del Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN) elaborado entre agosto de 2020 y diciembre de 2021.
El informe confirma la tendencia al control del uso de estos medicamentos para sus fines adecuados, si bien, los datos de las diferentes encuestas realizadas por este camino, aún queda un importante camino para conseguir una política de antibióticos coordinada entre los niveles asistenciales. Así mientras que la consolidación de iniciativas PROA (Programas de Optimización de Uso de los Antibióticos) está prácticamente generalizada (existe en el 95% de los centros), solamente el 31% de los participantes en las encuestas del PRAN confirma que su hospital conecta con Atención Primaria y realiza una política de antibióticos coordinada.
El informe también confirma que “se ha mejorado el sistema de vigilancia del consumo de antibióticos”, a través, entre otros, del documento marco para la Vigilancia Nacional de la Resistencia a Antimicrobianos, que recibe el apoyo de la Red de laboratorios para la vigilancia de los microoganismos resistentes (RedLabRA), en cuyo comité de coordinación se encuentra un representante del PRAN. Asimismo, el plan ha impulsado el uso técnicas de diagnóstico rápido y ha definido la prescripción diferida como herramienta de ayuda a la prescripción en Atención Primaria.
Junto al documento marco, el informe destaca también la publicación de la aplicación destinada a facilitar la prescripción prudente de antibióticos como la ‘Guía terapéutica antimicrobiana del Sistema Nacional de Salud’, que cuenta con una herramienta similar parecida en el ámbito de la salud animal.
Junto a ello, en el plano internacional, el PRAN ha trabajado activamente dentro de los diferentes foros de la Comisión Europea y actualmente está implicado en todas las iniciativas internacionales vinculadas a la resistencia a los antimicrobianos. Según indican, de 2017 a 2021, la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, en la que está integrado el Plan Nacional lideró 3 de las 9 áreas de trabajo de la Acción Conjunta Europea sobre Resistencia a los Antimicrobianos e Infecciones Asociadas a la Atención Sanitaria (EU-JAMRAI)
Salud animal
En el plano de la salud animal también se ha detectado una redución deun 56,7% en las ventas de antibióticos veterinarios. Igualmente, el informe destaca la evolución de los programas REDUCE, un programa de adhesión voluntaria con el que ya se logró en 2017 una reducción del consumo de colistina del 97,18% en el sector porcino. “Tal ha sido el éxito, que ya se ha ampliado en este último periodo a todos los antibióticos en el sector porcino y se expandido a otros 6 sectores: cunicultura, pollos de carne, bovinos de carne, bovinos de leche, ovino y caprino de carne”, aseguran.
Además, en octubre de 2021 se presentó el Proyecto de Vigilancia de Bacterias Patógenas Clínicas en sanidad animal que persigue facilitar la prescripción del veterinario teniendo en cuenta información epidemiológica y los principios de uso prudente de antibióticos. Este proyecto incluye el desarrollo de un mapa interactivo epidemiológico, una herramienta muy ambiciosa que ayudará a identificar las tendencias en la evolución de las resistencias.