El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Álava, Contra el Cáncer en Álava y el Colegio de Ópticos-Optometristas suman esfuerzos, un año más, en la prevención del cáncer de piel.
Como en años anteriores, farmacéuticos y voluntariado de Contra el Cáncer en Álava saldrán a la calle y a las piscinas de Vitoria-Gasteiz, para ofrecer información y consejos sobre una correcta fotoprotección, ya que esta “no debe limitarse al tiempo que pasamos en la playa o la piscina, sino que es importante mantenerse protegido en cualquier actividad al aire libre. A ellos, se unirán también profesionales ópticos-optometristas para aportar su conocimiento y recomendación en cuanto a la incidencia de la radiación solar en los ojos”.
El cáncer cutáneo es el más común de todos los tumores en la especie humana –se estima que afectará a 4 de cada 10 personas a lo largo de su vida- y su aparición guarda relación directa con la exposición solar, especialmente con las quemaduras sufridas durante la infancia o la adolescencia. La gerente de la Contra el Cáncer en Álava, Ainara Quintela, constata un aumento continuado de los casos de melanoma, el más agresivo de los diferentes tipos de cáncer. “En Euskadi, en 2021, según datos del Observatorio Contra el Cáncer, ha habido 290 nuevos casos y en Álava 42”.
La importancia de un diagnóstico precoz es fundamental ya que se estima que un millón y medio de pacientes en todo el mundo retrasan consultar con un médico cuando identifican por primera vez signos sospechosos de cáncer de piel. Y alrededor de 33.000 muertes se podrían haber evitado si los afectados hubiesen consultado con un profesional.
Naikare Díaz, responsable de prevención y promoción de la salud de Contra el Cáncer en Álava, destaca la importancia de autoexplorarse con la “Regla del ABCDE”. “Es necesario conocer las manchas y lunares presentes en nuestro cuerpo para saber si sufren cambios. Si vemos que son asimétricos, que tienen bordes irregulares, cambian de color, tienen un diámetro mayor a 6mm o sufren una evolución (pican, sangran...), es importante acudir a un especialista para realizar un diagnóstico”.
Por su parte, la presidenta del COF Álava, Milagros López de Ocáriz, destaca el papel del farmacéutico. “La farmacia comunitaria es un establecimiento idóneo para prestar asesoramiento sobre fotoprotección. Además de contar con una amplia variedad de productos con plenas garantías de calidad, adaptados a cada tipo de piel, no podemos olvidar que muchos tratamientos farmacológicos producen fotosensibilidad, por lo que es importante contar con el consejo de un profesional sanitario, experto en medicamentos”.
La directora del Centro de Información de Medicamentos del COF Álava, Marisa Martínez, incide en la importancia de la elección del fotoprotector adecuado para cada usuario, en función de su edad, fototipo cutáneo, así como en la selección del excipiente según la actividad que se vaya a realizar al aire libre; en la farmacia se ofrece consejo personalizado para ello. Además, recuerda los requisitos que debe cumplir el etiquetado correcto de estos productos, así como la recomendación de aplicar la protección en cantidad adecuada media hora antes de exponerse a sol, repetir la misma cada dos horas, especialmente tras el baño o excesiva transpiración, no olvidar proteger las zonas pequeñas como las orejas. También se recomienda beber agua con frecuencia y utilizar sombrillas, sombreros, gorras o camisetas en la exposición solar, evitando la franja horaria de 12:00 a 16:00.
Además, se aclara que las cremas autobronceadoras no protegen del sol y la fotoprotección oral nunca sustituye a la tópica; la complementa para alcanzar una protección solar más profunda e integral.
El delegado en Álava del colegio de Ópticos-Optometristas, José Luis Sáez Presa, insiste en que una de cada tres gafas de sol vendidas en España no pasa los controles necesarios de calidad, y advirtió del peligro de usar este tipo de gafas no homologadas. “Durante su uso, al bajar la intensidad de luz, las pupilas se dilatan más y quedan expuestas a mayores radiaciones solares inciden directamente en los ojos que se ven más afectados. Por lo tanto, si no se usa una protección solar ocular homologada, es mejor no usar ninguna”. Un consejo que también es válido para las gafas de sol destinadas al público infantil. El canal de compra que ofrece más garantías son los establecimientos de Óptica donde el óptico- optometrista, como profesional sanitario de la visión, es quien mejor le puede aconsejar y recomendar el filtro solar más adecuado para cada usuario.