La inmunoterapia ha abierto nuevas líneas de investigación que permiten ser optimistas en el futuro. “Desde el punto de vista médico, estoy seguro que no hemos alcanzado el máximo terapéutico a día de hoy, ya que esta nueva modalidad podría ofrecer enormes posibilidades en combinación con otros tratamientos”, así se expresó durante su intervención Alfonso Berrocal, jefe de Sección de Oncología del Hospital General Universitario de Valencia, quien se mostró convencido de que esta nueva línea terapéutica “supone un nuevo pilar en el tratamiento del cáncer puesto que podría aportar la posibilidad de mejorar las expectativas en pacientes con enfermedades en las que no es posible la curación”.
Y es que, debido al novedoso mecanismo de acción de la inmunoterapia en el tratamiento del cáncer, ha sido necesario aprender a manejar características especiales de respuesta y de toxicidad. Esta es una de las conclusiones en las que coincidieron los oncólogos reunidos por MSD en una conferencia titulada título “Inmunoterapia en cáncer: retos actuales y futuros del nuevo paradigma de tratamiento oncológico” que tuvo lugar en Alicante este jueves.
Durante su exposición, el Bartomeu Massuti, jefe de Servicio de Oncología del Hospital General Universitario de Alicante, apuntó que “actualmente, para los tratamientos oncológicos se considera prioritario la capacidad de predicción de resultados a nivel individual que hasta ahora no había sido posible con los tratamientos de quimioterapia citotóxica”. En su opinión, “en estos momentos la introducción de nuevas alternativas terapéuticas supone una herramienta para mejorar la eficiencia y contribuir a la sostenibilidad del sistema”.
Estos serían los principales retos del sistema sanitario, pero el clínico también tiene que hacer frente a barreras que limitan su trabajo y sobre las cuales reflexionó Berrocal. “El principal obstáculo que nos encontramos es la demora entre el conocimiento científico y la posibilidad de administrar el tratamiento a los enfermos”, explicó.
En este sentido, los buenos datos clínicos que abren vías de esperanza a los pacientes, se pueden ver frustrados por las habituales limitaciones que impiden que los pacientes tengan acceso a la innovación. Por ello, Mario González, gerente de la Gerencia de Gestión Integrada de Vigo, consideró que “uno de los retos a los que se enfrenta el sistema sanitario en la actualidad es precisamente ese, el de garantizar dicho acceso”. Según él, estamos ante un problema complejo con soluciones complejas donde el entorno y las posibilidades económico-financieras del sistema nacional de salud y del país en su conjunto, “tienen mucho que ver”.
En su opinión, “es necesario establecer mecanismos y métodos que prioricen el acceso a la innovación”. Se expuso como ejemplo la solución propuesta desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) que asocia el año ganado en calidad de vida al producto interior bruto por persona, considerando como muy coste-efectivo si es inferior a 1, aceptando como razonable entre 1 y 3 y valorando como coste inefectivo valores por encima de 3.
“Utilizar la farmacoeconomía y la dirección marcada por la OMS pueden ser, quizás, la guía que nos permita establecer unos criterios claros de asunción de determinados medicamentos innovadores”, concluyó González.
Nicolas Gonzalez Casares: