Profesión

Asefarma da claves a la farmacia para capear las bajadas fruto de la OPR

Asefarma emite una serie de recomendaciones, en el plano de la gestión de la oficina de farmacia, para paliar los efectos de las bajadas de precios derivadas de la entrada en vigor de la Orden de Precios de Referencia (OPR).
Gráfico diseñado por Asefarma.

Asefarma ha emitido una serie de recomendaciones dirigidas a las farmacias, en relación con la nueva Orden de Precios de Referencia (OPR), publicada el 28 de noviembre, pero que entró en vigor para las farmacias el día 1 de enero de 2019, y que establece la revisión de precios de 15.741 presentaciones de medicamentos, de las que 12.825 son dispensables en boticas y 2.916 en hospital. "Con dicha normativa, las oficinas de farmacia se enfrentan de nuevo a una bajada de precios", indican.

En relación con esto, la asesoría especializada en farmacias recuerda que los farmacéuticos tuvieron la posibilidad de continuar con la venta de los medicamentos afectados hasta el 31 de diciembre "al precio de venta al público anterior a esta reducción", una medida orientada a reducir el impacto en farmacias con stock previo.

Pero ya en 2019, una vez que la nueva OPR ha entrado en vigor, las farmacias que no lograran reducir el stock de productos comprados a precio antiguo necesitan una estrategia, y desde el Departamento de Consultoría de Asefarma les ofrecen algunas ideas, para trazar un plan de acción que les obligará a negociar con los laboratorios/proveedores estratégicos. Esto, aunque no les ayude a rebajar directamente el impacto, afirma Eva Ruiz, responsable del Departamento, "sí ayudará a gestionar mejor nuestro stock y mejorar la rentabilidad en el futuro".

Recomendaciones

En ese sentido, recomienda, en primer lugar, establecer como prioridad el dar salida de forma preferente a todos aquellos medicamentos afectados por esta normativa antes de que finalice el presente mes. Asimismo, de ahora en adelante se tratará de controlar y revisar de forma continuada el inventario de medicamentos, lo que implica realizar un inventario continuo ayuda a evitar el sobrestock, de determinadas referencias que en un momento dado pueden ser prescritas con asiduidad, pero que en un momento dado dejan de serlo o sufren una bajada de precios.

Unida a estas medidas, estaría, según Ruiz, la selección del surtido en función de los acuerdos a los que se pueda acceder, estableciendo relación "con aquellos proveedores de medicamentos (almacenes y laboratorios) que cierren condiciones de sell in estables, si es posible anuales, pero teniendo en cuenta, dentro del acuerdo, la existencia de condiciones favorables de sell out, como pueden ser aquellas en las que dichos proveedores compensen a la farmacia las diferencias de precio que se acusen, por este tipo de normativa, por caducidad, etc".

Finalmente, Asefarma recomienda llevar a cabo una gestión de compras optimizada, a través de "una categorización adecuada y un análisis previo a la compra de cada referencia, estableciendo una relación entre las cantidades pedidas y las cantidades vendidas, en un periodo corto de venta que debe tratar de ajustarse siempre que sea posible a la fecha de pago". 

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