En puridad la denominada ‘Ley Sara’ no es una ley, es una proposición no de ley y de hecho no tiene validez normativa alguna más allá de suponer una petición formal por parte del Congreso de los Diputados al Gobierno de España para que aborde de forma decidida el poner freno al intrusismo en las profesiones sanitarias, la aplicación de pseudoterapias y las informaciones engañosas.
El Congreso de los Diputados ha dado este jueves luz verde (292 votos, sobre 348 presentes) a esta iniciativa denominada oficialmente ‘Proposición no de Ley sobre cirugía estética y lucha contra el intrusismo y las pseudociencias’, con una amplia mayoría cimentada en la aceptación de la enmienda transaccional del PP, a una proposición original presentada por el PSOE.
El origen de la enmienda, y de ahí su nombre tiene que ver con Sara, una mujer de 39 años que falleció a resultas de una intervención de cirugía estética en Murcia, el pasado mes de enero. Sin embargo, aunque la moción centra su contenido los aspectos propios de las prácticas en cirugía estética, también plantea al Gobierno una demanda más amplia para “luchar por la erradicación de cualquier intrusismo y pseudociencia que afecte a las distintas profesiones sanitarias y a desarrollar el Plan Nacional de Pseudoterapias”.
Igualmente se insta a modificar “el RD 1277/2003 de 10 de octubre por el que se establecen las bases generales sobre autorización de centros, servicios y establecimientos sanitarios, con objeto de reforzar los artículos de la norma que correspondan, para evitar el intrusismo y garantizar que todas las actividades sanitarias se realizan por profesionales que dispongan de la titulación oficialmente reconocida”.
El texto final de la iniciativa no ha contado con la aplicación de otras enmiendas, como las que solicitaba Ciudadanos para la realización de un estudio sobre el intrusismo en las profesiones sanitarias en España, o la del Partido Popular, que solicitaba también el cumplimiento de todas las garantías de la ley del paciente.
De hecho, desde el Partido Popular se ha reiterado las críticas hacia el grupo socialista por votar en contra de la proposición que los populares presentaron antes del verano en relación a regular la publicidad sanitaria, que buscaba “erradicar situaciones que han generado y generan graves perjuicios a los usuarios”.
Nicolas Gonzalez Casares: