El Servicio de Farmacia del Hospital Universitario y Politécnico La Fe ha incorporado un dispositivo que aplica un sistema de análisis de la ‘huella digital espectrofotométrica’ en el proceso de elaboración de medicamentos en las salas blancas, para mejorar la seguridad clínica y seguir incorporado mejoras en la calidad y seguridad de los circuitos de preparación de mezclas oncohematológicas.
Se trata de la implementación de un nuevo elemento de control en el proceso de elaboración de medicamentos en las salas blancas a través de un dispositivo capaz de leer la ‘huella digital’ del medicamento, “identificando tanto la identidad del medicamento como su dosis en la preparación mediante la comparación de dicha huella con la información contenida en una biblioteca de patrones espectrofotométricos digitales previamente confeccionada”, ha explicado el director del Área Clínica del Medicamento y jefe del Servicio de Farmacia del Hospital La Fe, José Luis Poveda.
“La preparación de mezclas oncohematológicas y alopeligrosas, centralizada en las salas blancas del Servicio de Farmacia, supone un punto crítico a la hora de asegurar un estándar de calidad y seguridad, ya que el estrecho margen terapéutico de estos fármacos supone un riesgo potencial para el paciente si se producen errores durante la elaboración”, ha especificado Poveda.
Este dispositivo incorporado en el punto final del circuito de elaboración, justo antes de la dispensación, supone un nuevo sistema de validación digital que logra detectar posibles errores en la preparación. Esto añade un sello de calidad al cuidado del paciente, asegurando la integridad del proceso y la calidad de la preparación, certificando que los medicamentos empleados corresponden con la prescripción individualizada.
Actualmente, el Servicio de Farmacia del Hospital La Fe se encuentra configurando un banco de ‘’huellas digitales’’ de 61 moléculas y 1.300 concentraciones con el que, junto con los sistemas de control de calidad ya en funcionamiento, garantizará la idoneidad de las más de 60.000 mezclas parenterales, entre elaboraciones oncohematológicas y no oncohematológicas, que se llevan a cabo a lo largo de un año.
El desarrollo y puesta en marcha de esta mejora está siendo posible gracias al esfuerzo conjunto y constante de farmacéuticos y enfermeros en la búsqueda de un procedimiento de trabajo ágil, fiable y reproducible que posibilite elevar la calidad del proceso asistencial, ha explicado el especialista Eduardo Guerrero, del Servicio de Farmacia del Hospital La Fe.