“La salud de la mujer ha sido históricamente invisibilizada, y su abordaje sigue presentando desafíos en la práctica clínica”, así lo señalan los organizadores del curso ‘Salud Diferencial de la Mujer con perspectiva de género y sexo’, una iniciativa pionera dentro del ámbito farmacéutico que ha sido puesta en marcha por el Colegio de Farmacéuticos de Sevilla junto a la Compañía Organon y el apoyo del Instituto Andaluz de la Mujer.
La falta de representación femenina en los ensayos clínicos ha generado lagunas en el conocimiento sobre el impacto real de ciertos medicamentos en el organismo femenino, “ya que muchos de ellos pueden generar en las mujeres más efectos secundarios, y en algunos casos podrían necesitar dosis más bajas o tratamientos ajustados”, señalan desde el colegio andaluz.
Sin embargo, este no es el único problema, muchas enfermedades se manifiestan de manera diferente en hombres y mujeres, como en el caso de los infartos, cuyos síntomas en la mujer pueden pasar desapercibidos y retrasar el diagnóstico.
Diseñado como un proyecto multidisciplinar con la salud de la mujer en el centro, el curso nace con el objetivo de fortalecer el papel del farmacéutico como educador y promotor de la salud de la mujer, promoviendo un mensaje único en la atención al paciente y una mayor coordinación entre los distintos profesionales sanitarios.
“La comunicación entre médicos, farmacéuticos y psicólogos es clave para garantizar un abordaje integral y evitar diferencias en la información que recibe la mujer en cada punto de atención sanitaria”, señalan.
Durante la presentación del curso, la secretaría del Colegio de Farmacéuticos de Sevilla, Rosalía García, destacó la relevancia de esta iniciativa: "la farmacia comunitaria, por su cercanía y accesibilidad, es un pilar fundamental en la educación sanitaria de la
mujer. Este curso, con un enfoque sanitario con perspectiva de género y sexo, permitirá a los farmacéuticos adquirir herramientas para detectar, orientar y acompañar a las pacientes en su autocuidado, mejorando su salud y calidad de vida".
La presentación del curso contó con la participación de expertos como Cristina Muñoz, psicóloga especializada en salud mental femenina; Carmen Jódar, médico de atención primaria; y Ana I. Nieto, farmacéutica comunitaria.
Cristina Muñoz, subrayó que “como profesional de la salud mental, esta formación me parece absolutamente trascendental y un paso adelante hacia la comprensión de la mujer en su totalidad. Se trata de unificar a nivel institucional y organizativo en un contexto (se podría decir) más ‘formal’ un trabajo que llevamos haciendo muchos años codo con codo profesionales de distintas disciplinas. El trato con la mujer requiere de acciones específicas que nos garanticen una mirada actualizada, holística y positiva para poder integrar toda su casuística y circunstancias psicosociales hacia diagnósticos que se lleven a cabo con la máxima exactitud y tratamientos adaptados a sus necesidades biográficas. Particularmente estoy apasionada con este proyecto y con la viabilidad que al fin se le está dando a lasdiferenciaciones de género”.
Por su parte, Carmen Jódar quiso resaltar “la oportunidad que supone este curso para fortalecer el trabajo en equipo entre la farmacia comunitaria y la atención primaria, dos pilares esenciales en el cuidado de la salud. La coordinación entre ambos ámbitos permite
ofrecer una atención más integral, optimizando el seguimiento de los pacientes y mejorando la adherencia al tratamiento. Además, contar con un discurso unificado entre farmacéuticos y médicos enriquece la experiencia del paciente, proporcionando información clara,
precisa y coherente en cada punto de contacto con el sistema sanitario. La comunicación efectiva entre los profesionales garantiza que el mensaje sea comprensible y accesible, evitando confusión y reforzando la confianza en el tratamiento”.
La visión de género en la comunicación sanitaria “es clave para identificar desigualdades, adaptar los mensajes y mejorar la relación entre pacientes y profesionales, promoviendo una atención más personalizada y efectiva”, señala.
En ese sentido, Ana I. Nieto, destacó qué "este curso es una ocasión para mejorar nuestra práctica diaria en la farmacia comunitaria, proporcionándonos herramientas clave como protocolos de actuación y técnicas de comunicación para poner nuestra atención en las mujeres y poder acogerlas de una forma más personalizada, reconociendo sus diferencias en salud. Además, nos capacita para detectar señales de alerta, fomentar hábitos saludables y prevenir enfermedades, consolidando nuestro papel como educadores sanitarios individuales y con la comunidad”.
“Empoderar a las mujeres con información clave sobre su salud no solo mejora su calidad de vida, sino que también nos posiciona como profesionales innovadores y comprometidos con su bienestar. Su enfoque multidisciplinar, con la participación de médicos, farmacéuticos, psicólogos, nutricionistas y otros expertos, nos permite adquirir una visión integral de la salud de la mujer y mantenernos actualizados en un campo en constante evolución”, asegura.
“Como farmacéuticos, tenemos la responsabilidad de contribuir a una sociedad más justa e inclusiva, y esta formación nos brinda la oportunidad de hacerlo, ayudando a construir un sistema de salud más equitativo y adaptado a las necesidades específicas de la mujer”, concluyó
También intervinieron representantes institucionales como Manuel Anxo Blanco, director ejecutivo de Relaciones Institucionales de Organon, quien señaló que “el propósito de Organon es mejorar la salud integral de las mujeres. Y para lograrlo, los profesionales sanitarios, las instituciones, la industria farmacéutica y la sociedad en general, debemos tener una nueva mirada hacia sus necesidades, ya sea respecto a las enfermedades femeninas o respecto a las enfermedades comunes que son más frecuentes en ellas o que cursan de forma diferente. Esta campaña es un claro ejemplo de lo que podemos hacer juntos, siempre con el objetivo común de ofrecer el mejor servicio a la ciudadanía”.
La farmacia, un punto de referencia clave
Con 870 farmacias en Sevilla y un 67 % de pacientes que visitan la farmacia al menos una vez al mes, la capilaridad del sector farmacéutico convierte a estos establecimientos en un espacio clave para la educación sanitaria y la promoción del autocuidado de la mujer.
El curso abordará patologías frecuentes en la mujer a lo largo de todas las etapas de su vida, desde la infancia hasta la edad adulta y la menopausia, como: salud mental; enfermedades cardiovasculares; osteoporosis; infecciones del tracto urinario y menopausia o salud sexual.
Además de la formación, el proyecto incluye protocolos de actuación especializados para farmacias acreditadas y un registro de impactos en salud, lo que permitirá evaluar la eficacia de las intervenciones realizadas. También se desarrollarán charlas divulgativas dirigidas a la población, en colaboración con asociaciones de mujeres y centros cívicos, con el objetivo de extender el conocimiento sobre la salud diferencial de la mujer más allá del ámbito profesional.
Uno de los pilares de esta formación es dotar a las mujeres de herramientas para gestionar mejor su propia salud. La farmacia comunitaria, como espacio de proximidad, puede ayudar a reducir la brecha de género en salud a través de un asesoramiento basado en la ciencia y la comunicación efectiva con otros profesionales sanitarios.
Rocío Hernández, consejera de Salud de Andalucía: 
Nicolás González Casares, eurodiputado de Socialistas & Demócratas (S&D - PSOE): 
Juan José Pedreño, consejero de Salud de Murcia: 
Carmen Martínez, portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados: 
Margarita de la Pisa, eurodiputada de Vox.: