Con el verano, llega el descanso pero también el sol. Las farmacias se convierten año tras años en la principal plataforma a la que los pacientes tienen acceso para conocer las precauciones y consejos que se deben tomar frente a las altas temperaturas. El aumento de cánceres cutáneos, cada año se traduce en 80.000 nuevos casos de los cuales 6.000 pertenecen a melanomas. Los malos hábitos frente al sol justifican el papel imprescindible del farmacéutico. No te olvides de dar estos 10 consejos, recopilados por Teva, a tus pacientes para que disfruten del verano de la forma más sana:
- Las horas de máxima exposición solar son entre las 11h y las 15h, evita tomar el sol y déjalo para un poco más tarde.
A estas horas el nivel de radiaciones UV es mayor y por lo tanto más agresivo y cancerígeno. No hay que olvidar que aunque el sol tiene consecuencias beneficiosas para la salud, también las tiene nocivas, tales como el envejecimiento prematuro de la piel, la formación de arrugas y manchas antiestéticas, quemaduras de la piel, disminución de las defensas, cataratas en los ojos o incluso puede dar origen a la formación de cáncer de piel.
- Las gafas de sol homologadas son imprescindibles
El verano, es la época del año en que los rayos solares caen perpendiculares sobre la tierra lo que la convierte también en la época más molesta y peligrosa para nuestros ojos. Usar unas gafas de sol es imprescindible para protegernos de las radiaciones nocivas, pero ¿cómo saber si son o no adecuadas?
Deben estar homologadas y las lentes deben cumplir la legislación europea. Podremos saber si son las adecuadas siempre que lleven el distintivo CE, bien en el propio artículo o bien en el folleto informativo.
Usar unas gafas adecuadas nos garantizará evitar daños como la degeneración macular asociada a la edad, prevenir la aceleración de las cataratas o en algunos casos evitar la enfermedad Pterigium con la que está íntimamente relacionada.
- El fotoprotector 30 minutos antes de la exposición solar
Aplicar el producto previamente a la exposición solar también es imprescindible para que el producto penetre bien en la piel y asegurar así una protección eficaz.
- No estés tumbado al sol durante horas
La sobreexposición a la radiación solar es altamente peligrosa, además de tomar las precauciones suficientes, se debe limitar el tiempo de exposición solar al apropiado para tu fototipo.
- Cuidado con los medicamentos que tomes
Algunos medicamentos y productos estéticos pueden producir fotosensibilidad (una reacción cutánea anormal que se produce por la interacción entre las radiaciones de la luz ultravioleta y ciertas sustancias químicas). Estas sustancias fotosensibilizantes pueden provocar diferentes reacciones al activarse por los rayos ultravioletas. Esta combinación puede provocar dos tipos de reacciones: fototóxicas (las lesiones tienen la apariencia de quemaduras solares y están acompañadas por ardor y formación de microvesículas o bien de urticaria) o fotoalérgicas (se deben a medicamentos que se aplican sobre la piel).
- Ponte ropa holgada y utiliza sombrero
La ropa y los sombreros también son unos de nuestros mecanismos de defensa contra los rayos ultravioletas.
- Elige el fotoprotector según tu fototipo
El fotoprotector es nuestro mejor aliado estos días, debemos aplicarnos productos con factor de protección (FP). El FP sirve para calcular cuánto podemos prolongar la estancia al sol. ¿Cómo se calcula? Multiplicando el tiempo que tardamos en quemarnos por el número del FP. Por ejemplo, si una persona aguanta 20 minutos y usa FP20: 20x20= 400 minutos, es decir 6h y 40' sin quemarse.
Hay seis fototipos según los cuales debes usar una protección u otra:
Tipo I: Protección muy alta FSP 50. Personas con piel muy clara, con abundantes pecas, albinas o pelirrojas o de ojos azules.
Tipo II: Protección alta FSP 30-50. Son personas de piel clara, con pecas, pelirrojos o rubios con ojos azules o verdes
Tipo III: Protección media FSP 15-20-25. Individuos de piel blanca (europeos)
Tipo IV: Protección baja- media FSP 10-15-20. Individuos de piel blanca, amarronada o ligeramente morena, piel y ojos oscuros (áreas mediterráneas)
Tipo V: Protección baja FSP 10. Personas de piel morena
Tipo VI: Protección baja FSP<10. Personas de piel negra
Fototipo | I | II | III | IV |
Color de la piel | Blanco-lechoso | Blanco-ligeramente marrón | Marrón suave | Marrón intenso |
Color de los ojos | Azul | Azul o verde | Marrón | Marrón o negro |
Color del pelo | Rojizo/rubio | Rubio/castaño | Castaño | Castaño o negro |
Se quema | Siempre | Casi siempre | Raras veces | Nunca |
Se broncea | Nunca | Ligeramente | Siempre | Siempre |
- Hay que prevenir aunque esté nublado
Las nubes frenan el calor pero no los rayos ultravioletas que pueden acabar lesionando nuestra piel. Este efecto puede engañar y hacer que se olvide la importancia de la crema solar para evitar las quemaduras.
- La hidratación es vital
Beber agua es más importante que nunca en esta época. La sudoración, siendo el principal mecanismo de defensa contra la elevación de la temperatura corporal, es también la responsable de la pérdida de agua. Es necesario beber antes de tener sed. Sólo con que el cuerpo pierda el 1% de líquidos aparece la sensación de sed; si esta pérdida es del 2%, se reduce el rendimiento y la resistencia y a partir del 5% se puede producir una aceleración del ritmo cardíaco, apatía, vómitos y espasmos musculares.
Como regla general por cada kilo de peso corporal se requieren 31.5 ml de agua, que puede verse incrementado hasta medio litro diario con la aparición de las altas temperaturas.
- Los más protegidos; los niños
Todas las indicaciones son especialmente importantes en el caso de los niños ya que son más vulnerables a los efectos de la radiación solar. Los más pequeños deben beber mucho agua y permanecer en la sombra con gorra, ropa y gafas para conseguir una mayor protección. Además se deben utilizar productos de FP30 , aplicados periódicamente y de forma generosa.