Con motivo de la Semana Europea de la Inmunización (SEI) 2025, el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) destaca los riesgos de una cobertura de vacunación deficiente en Europa y publica un conjunto de herramientas operativas que las autoridades de salud pública pueden utilizar para mejorar la aceptación y el uso de la vacunación. El aumento de diez veces en los casos de sarampión notificados en la Unión Europea y el Espacio Económico Europeo (UE/EEE) y la detección de poliovirus derivados de la vacuna en cuatro países de la UE/EEE en 2024 son dos señales claras de la necesidad de lograr y mantener una alta cobertura de inmunización para proteger a la población europea.
“La vacunación sigue siendo una de las herramientas más eficaces en salud pública, previniendo enfermedades como el sarampión, la poliomielitis, la difteria y la tos ferina. Sin embargo, más de 35 000 personas fueron diagnosticadas con sarampión en la UE/EEE en 2024 y 23 personas, 14 de ellas niños menores de cinco años, fallecieron tras contraer la enfermedad”.
“Gracias a la vacunación, hemos erradicado la viruela y controlado enfermedades graves como la poliomielitis, la difteria y el tétanos. El reto actual de la inmunización reside en cómo salvaguardar estos logros. Es necesario intensificar los esfuerzos para mantener una alta cobertura de vacunación. Cada dosis de vacuna cuenta, y el momento de administración es fundamental para una protección óptima”, afirma Pamela Rendi-Wagner, directora del ECDC.
El ECDC publica nuevos datos sobre el aumento de casi diez veces en las infecciones por sarampión registradas en la UE/EEE en 2024. Los datos demuestran el impacto a largo plazo de la disminución de la vacunación y las brechas de inmunidad: entre las personas con estado de vacunación conocido que contrajeron sarampión en 2024, ocho de cada diez no habían sido inmunizadas. El sarampión puede afectar a cualquier persona sin protección, no solo a niños, sino también a adolescentes y adultos. Más de una cuarta parte (26%) de las personas diagnosticadas con sarampión en 2024 tenían más de 14 años.
Para prevenir brotes de sarampión y proteger a las poblaciones vulnerables, al menos el 95% de la población elegible para la vacunación debería recibir dos dosis de la vacuna triple vírica (SPR). Sin embargo, los niveles de vacunación en la UE/EEE aún están por debajo de este objetivo, y estimaciones recientes muestran que solo cuatro países (Hungría, Malta, Portugal y Eslovaquia) informan de dicha cobertura para ambas dosis.
El ECDC estima que alrededor de 600 000 niños de entre 12 y 23 meses podrían no haber recibido su pauta completa de vacunación primaria contra la polio entre 2022 y 2023. Entre septiembre y diciembre de 2024, se detectó poliovirus tipo 2 circulante derivado de la vacuna en muestras de aguas residuales de Finlandia, Alemania, Polonia, España y el Reino Unido. Hasta la fecha, no se han notificado casos de polio en humanos, y la UE/EEE continúa estando libre de polio. Sin embargo, para que esto siga siendo así, es necesario implementar campañas de vacunación de refuerzo específicas y mejorar la vigilancia para abordar las brechas de vacunación existentes.
La evidencia es clara: una cobertura de vacunación insuficiente deja a demasiadas personas vulnerables a la enfermedad, incluyendo a niños demasiado pequeños para ser vacunados y a personas que no pueden recibir vacunas por razones médicas. La protección de estos grupos depende de una alta tasa de vacunación entre la población general elegible.
El éxito de los programas de vacunación se basa en comprender y responder a las creencias, preocupaciones y expectativas de la población. Comprender las barreras sociales y conductuales, así como los factores que facilitan la vacunación, es esencial para diseñar estrategias e intervenciones eficaces que aumenten la aceptación y la captación de la vacunación.
Para ayudar a los países de la UE/EEE a tomar estas medidas, el ECDC ha publicado el informe ‘Herramientas y métodos para promover la aceptación y la captación de la vacunación: un enfoque basado en las ciencias sociales y del comportamiento’. El informe recopila un conjunto de herramientas operativas en formatos utilizables y adaptables que se adaptan al contexto real en el que trabajan las autoridades de salud pública y describe los programas de vacunación que pueden ayudar a adaptar sus esfuerzos a las necesidades y los desafíos específicos de las diversas comunidades.
Además, la implementación de sistemas modernos y digitalizados de información sobre inmunización para identificar y llegar a las personas no vacunadas es fundamental y debe formar parte integral de los esfuerzos nacionales para mejorar el rendimiento y la gestión del programa nacional de inmunización en general.
La inversión continua de la UE y de los países en una vigilancia de alta calidad y en la investigación rápida de brotes es clave para supervisar de cerca la epidemiología de las enfermedades prevenibles mediante vacunación en la UE/EEE y para identificar y abordar las deficiencias de inmunidad en la población.