La Federación Farmacéutica Internacional (FIP) ha publicado un documento de posicionamiento en el que apuesta por la promoción de estrategias y servicios que "empoderen a los cuidadores informales, particularmente a las mujeres". Opina, a este respecto, que la farmacia podría ejercer un importante papel reforzando los servicios que ofrecen a las mujeres para que puedan ofrecer esos cuidados en casa. "Los sistemas sanitarios dejan recaer un peso importante, en concepto de cuidados informales, sobre las mujeres, pero no las proveen con el apoyo necesario para que puedan desempeñar esa labor", dicen.
Por este motivo, las 144 organizaciones que integran la FIP, representantes de 103 países, han adoptado esta declaración, titulada 'Farmacéuticos ayudando a las mujeres y al uso responsable de los medicamentos. Empoderando a los cuidadores informales', con el que instan a los gobiernos a "estimular a los farmacéuticos en esta dirección, con la remuneración adecuada, teniendo en cuenta el valor social y los potenciales ahorros de estas intervenciones".
Para la FIP, los resultados en salud pueden ser mejorados "si se garantiza un compromiso financiero para proyectos de formación y empoderamiento dirigidos a mujeres cuidadoras, así como para servicios centrados en ellas y provistos por los farmacéuticos en colaboración con otros profesionales sanitarios".
Con la adopción de esta declaración, las organizaciones nacionales se comprometen a sugerir a los gobiernos acciones en este sentido, así como idear y desplegar proyectos que puedan servir, por ejemplo, para identificar las necesidades de las mujeres cuidadoras y después investigar y desarrollar servicios que sirvan para darles respuesta.
"Entender cómo los farmacéuticos pueden apoyar a las mujeres en su rol de cuidadoras informales puede facilitar la consecución de los ambiciosos Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y la igualdad de género para 2030", ha afirmado Ema Paulino, FIP professional secretary.