La vid roja o Vitis vinífera es un arbusto bastante conocido en nuestra cultura tanto por su fruto, las uvas, como por el uso que se hace de ellas en la elaboración del vino. Si bien los frutos de la vid tienen también efectos beneficios para la salud, hoy nos vamos a centrar en el uso medicinal de las hojas de la vid roja. Hojas que se utilizan tradicionalmente como venotónico, vasoprotector y astringente.
Las hojas de la vid roja se enmarcarían dentro de las plantas medicinales que favorecen la circulación sanguínea, al presentar actividad tonificante en venas y capilares.
En cuanto a su composición, las hojas de vid roja deben sus beneficios a la presencia de sales minerales, vitamina C y diversos fitonutrientes entre los que cabe destacar: flavonoides,como la rutina y la quercetina; o taninos y ácidos fenólicos como, el ácido clorogénico.
La Agencia Europea del Medicamento ( EMA, por sus siglas en inglés) recomienda dos usos: el primero, como uso bien establecido, es la administración oral del extracto seco de hoja de la vid para el tratamiento de la insuficiencia venosa crónica y sus síntomas. Síntomas como hinchazón de las piernas, venas varicosas, sensación de pesadez, cansancio, dolor o picor.
Y segundo uso, como empleo tradicional, para el alivio de los síntomas de malestar y pesadez en las piernas relacionados con trastornos venosos leves, para el alivio sintomático del picor y del ardor asociados con las hemorroides, y para el alivio de los síntomas de fragilidad capilar cutánea.
En cuanto a las dosis, es importante destacar que se han de ajustar en función de la edad y del peso del paciente. No se han descrito interacciones ni efectos secundarios de la vid roja. No obstante, no se aconseja su empleo durante el embarazo o la lactancia debido a la ausencia de datos.
Y, recuerda pregunta siempre a tu farmacéutico de confianza, experto en plantas medicinales. Te aconsejaremos y resolveremos cualquier otra duda que tengas.
Recuerda, ante cualquier duda acude a tu farmacia y consulta a tu farmacéutico.