La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó el pasado 20 de abril una ‘guía internacional sobre la certificación y clasificación del covid-19 como causa de la muerte’. Según esa guía, los fallecimientos por covid-19 deberían ser codificados según el CIE-10 con dos códigos diferenciados, en función de si mediaba o no una prueba confirmatoria de la presencia del virus, como puede ser una PCR.
De este modo, la OMS explicaba que se debía utilizar el código U07.1 para los casos en los que el virus SARS-CoV2 hubiera sido identificado; mientras que el código U07.2 se utilizaría para los casos en los que el virus no hubiera sido identificado y el diagnóstico fuera clínico o epidemiológico y clasificado como probable o sospechosos.
Pese a esta clara instrucción, el Ministerio de Sanidad no parece que vaya a seguir las orientaciones de la OMS según se desprende de un documento ‘Anuncio de cambio y nueva normativa para la codificación de la infección por SARS-CoV-2 (covid-19). Este texto, que deberá seguirse desde el 1 de julio, solo hace referencia a la codificación U07.1 de casos confirmados por PRC y no menciona en ningún momento del código U07.2 para los casos sospechosos y probables.
En el texto se reafirma en la codificación correcta solo de los casos confirmados. Se indica que “solo deben codificarse como covid-19 los diagnósticos confirmados que hayan sido constatados por el clínico o por la presencia documental de una prueba con resultado positivo a covid-19”. Es decir, que Sanidad no va a cambiar la línea seguida hasta el momento y que ha propiciado que el número oficial de fallecidos por coronavirus esté muy lejos de la cifra real.
Codificación de los no confirmados
En el documento publicado por Sanidad, para el caso de los pacientes sospechosos, posibles, probables o no concluyentes, se indica a los profesionales que “no asigne el código U07.1, asigne un código que explique el motivo del encuentro y secuencie a continuación el código Z20.828 Contacto y (sospecha de) exposición a otras enfermedades víricas transmisibles”.
El código Z20.828 contacto y (sospecha de) exposición a otras enfermedades víricas transmisibles, “debe usarse en pacientes que tienen una exposición conocida o sospechada a covid-19, presentan signos o síntomas asociados al COVID-19, y los resultados de la prueba son negativos, no concluyentes o desconocidos (o la prueba no está disponible)”, señala el documento. Es decir, que en vez de utilizar el código U07.2 específico para los casos sospechosos, probables y posibles de infección por covid-19, siguiendo la clara instrucción de la OMS, Sanidad insta a utilizar el genérico Z20.828 de contacto o exposición a otras enfermedades víricas transmisibles.
En su introducción, la guía de la subdirección general de Información Sanitaria del Ministerio de Sanidad reconoce que “en febrero de 2020 la OMS estableció un código de emergencia en CIE-10 (U07.1 COVID-19) para la codificación de las infecciones por covid-19”, no obstante, señala que por el desarrollo de la pandemia “se decidió no implementar el nuevo código hasta que se produjese una disminución en la presión asistencial y los sistemas de información pudiesen asumir el cambio”. Ese momento ha llegado ahora, pero lo que no implanta Sanidad es el segundo código habilitado el 20 de abril por la OMS para los casos no confirmados por PCR: U07.2 COVID-19.
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Carmen Martínez, portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados: 
Margarita de la Pisa, eurodiputada de Vox.: 
Ion Arocena, director general de la Asociación Española de Bioempresas (Asebio): 
Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad:
Esos códigos son de dos clasificaciones distintas. El U07.1 pertenece a la clasificación de la OMS, y el Z20.828 a la CIE-10