El Instituto Catalán de Oncología (ICO) y el Departamento de Salud de Cataluña han hecho públicos los resultados de un estudio, realizado en el marco del Programa de Investigación en Epidemiología del Cáncer, que mostrarían una reducción del 61% (pasando de 194 nuevos casos por cada 100.000 habitantes en 2012 a 75 casos por cada 100.000 habitantes en 2016) en la incidencia de verrugas anogenitales en chicas de 16 a 19 años como consecuencia de la vacunación sistemática contra el virus del papiloma humano (VPH).
Dicha intervención se realizó a través del Programa de vacunación contra el VPH, que se puso en marcha en esta comunidad autónoma en 2008 y en el que participó el 80% de las niñas de 6º de primaria (entre 11 y 12 años).
El estudio, publicado en la revista Preventive Medicine, habría evidenciado también la reversión de la tendencia al aumento de las verrugas genitales en los chicos de 20 a 25 años no vacunados, lo que indica un efecto de protección de grupo de la vacuna.
Especifican que la vacuna administrada es la tetravalente, que protege contra los tipos de VPH oncogénicos 16 y 18, causantes del 70% los cánceres de cuello uterino y, además, y también contra los tipos no oncogénicos 6 y 11, causantes del 90% de las verrugas anogenitales.
Aclaran además que la vacunación sistemática a chicas de 11-12 años de edad se ha mantenido en Cataluña desde el curso 2008-2009. Inicialmente, se aplicó una pauta de tres dosis, aunque en el curso 2014-2015 se redujo a dos. Finalmente, en el curso 2017-2018 se ha iniciado la vacunación con la nonavalente.
Además de las chicas nacidas a partir de 1997, que están ya incluidas en la vacunación sistemática y para las que permanece abierta la opción si no se vacunaron en super momento, Cataluña ofrece también la vacunación selectiva a grupos de riesgo, como los de las mujeres a las que se las ha diagnosticado una neoplasia intraepitelial cervical moderada o de un grado más avanzado (NIC 2+) o un adenocarcinoma endocervical in situ (AIS); las mujeres y hombres con infecciones por el VIH hasta los 26 años; los hombres que mantienen relaciones homosexuales hasta los 26 años; los trabajadores y trabajadoras del sexo, hombres y mujeres, hasta los 26 años, y las personas que han sufrido abuso sexual, hasta la misma edad.
Nicolas Gonzalez Casares: