Los informes que elabore la Red Española de Agencias de Evaluación de Tecnologías y Prestaciones del SNS (RedETS) contarán con la participación de la industria farmacéutica para la aportación de documentación para la elaboración de los mismos, en caso necesario, así como en una fase de alegaciones al borrador del informe final. Esta colaboración se ha plasmado en el ‘Documento Marco para las Relaciones de la RedETS con la industria’, un procedimiento que ha sido presentado en una jornada informativa online organizada por la Dirección General de Cartera Común de Servicios del SNS y Farmacia (DGCCF) junto a la RedETS.
La presentación de este documento ha contado con la participación de la máxima responsable de la DGCCF, Patricia Lacruz, que ha realizado la presentación; así como del jefe de Servicio de Evaluación del Servicio Canario de Salud (SESCS), Pedro Serrano, que ha expuesto los aspectos técnicos esenciales del documento marco; y de la subdirectora general de Cartera de Servicios del SNS y Fondos de Compensación del Ministerio de Sanidad, Cristina González del Yerro, que ha clausurado.
Lacruz ha destacado que contar con un proceso más participativo “aportará más transparencia” y enriquecerá la calidad final del producto, al contar con distintas perspectivas. Todo ello, según dijo, manteniendo su rigor.
La directora de la Cartera de Servicios del SNS añadió que este nuevo marco metodológico ya ha sido puesto en marcha con la incorporación de la participación de los pacientes, a través de una estrategia progresiva de implicación de estos. En este caso, inicialmente se estableció el marco conceptual, similar al que actualmente se presenta hoy y se comenzó la participación sistematizada y actualmente se está planificando la evaluación de su implementación. Además, para Lacruz, este paso “no se queda aquí” ya que explicó que dentro del plan de trabajo se contempla la elaboración del marco metodológico para la incorporación de los profesionales sanitarios.
Lacruz aprovechó su intervención para poner en valor a la RedETS, como órgano científico-técnico clave para el SNS ya que, según dijo, desde su creación en el año 2012 aporta “un valor indudable al sistema sanitario y a la ciudadanía”. Tal y como explicó, para la inclusión de nuevas prestaciones así como tecnologías sanitarias en la cartera común de servicios, “es preceptiva la evaluación para una toma de decisiones informada y coste-efectiva”.
Por otro lado, Lacruz puso de manifiesto que la apuesta por la RedETS “no son solo palabras”, sino también hechos que demuestran el convencimiento del Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas de la utilidad de esta Red de Evaluación. Lacruz destacó que desde el año 2020, el presupuesto destinado a las actividades de la RedETS ha aumentado, por primera vez desde su creación, concretamente un 48,2 por ciento, lo que ha supuesto un aumento de dos millones de euros y este incremento se ha consolidado para el año 2022”. Además, señaló que se han incorporado líneas de acciones de alto interés sanitario, como son la evaluación de medidas no farmacológicas en el contexto de la pandemia, la evaluación de servicios digitales en salud y la evaluación no farmacológica de las tecnologías relacionadas con la medicina personalizada de precisión.
Lacruz afirmó que existe un “compromiso firme” de participación de los agentes de interés principales en las evaluaciones de tecnología sanitaria de forma estructurada, ordenada y rigurosa y, en este caso, la participación de la industria en aquellas evaluaciones en las que la intervención implique una tecnología comercial.
Método y procedimiento
Por su parte, el jefe de Servicio del SESCS ha señalado los elementos centrales de especial relevancia que recoge el documento elaborado. En este sentido, ha destacado que este procedimiento ha sido realizado de forma colaborativa por todos los integrantes de la RedETS a partir de una primera revisión de la literatura internacional sobre la participación de la industria en las actividades de evaluación de tecnología sanitaria, así como experiencias de otros países que han dado este mismo paso.
Esta información se ha adaptado al entorno del SNS mediante una serie de entrevistas semi estructuradas a la industria, representantes de pacientes, profesionales y representantes de partidos políticos, así como responsables del Ministerio de Sanidad y responsables de la propia RedETS.
La presentación se centró en los elementos de interacción entre la industria y la propia red. En este sentido, señaló que el primero de ellos consiste en el compromiso de la publicación precoz del plan de trabajo anual, por parte de RedETS, con el fin de que sea conocido. En segundo lugar, hizo referencia a que el esfuerzo se orientará hacía la identificación de organizaciones procedentes de la industria que puedan estar interesados en estos informes de manera que puedan realizar aportaciones. Estas organizaciones podrán ser propuestas tanto por las agencias regionales como por la aportación de Fenin u otras organizaciones del sector.
Serrano explicó que es posible que en algunos casos concretos, “especialmente cuando los informes de evaluación descansen en dossieres presentados por la industria y literatura científica”, podría ser necesaria la celebración de encuentros con las compañías afectadas para llevar a cabo aclaraciones, siendo estos de carácter opcional y siempre a instancias de la RedETS.
Además, una vez que se disponga de la versión preliminar del informe final, se compartirá con los representantes de la industria interesados para recabar su feedback y tener en cuenta las posibles alegaciones que se realicen. Cabe señalar que las aportaciones realizadas por la industria “no podrán afectar a los objetivos del informe que vienen determinados por la autoridad sanitaria”.
Con respecto la ejecución material de las colaboraciones de la industria, Serrano explicó que se ha limitado a un plazo de 14 días naturales. Además, hizo referencia a que se obligará a la firma de un compromiso de confidencialidad de la entidad participante para garantizar que la información compartida no vea la luz hasta el momento en que el informe finalice y sea utilizado para la toma de decisiones.
Puesta en marcha progresiva
La clausura de la jornada ha sido llevada a cabo por la subdirectora general de Cartera de Servicios del SNS y Fondos de Compensación del Ministerio de Sanidad, Cristina González del Yerro, quien ha explicado que este procedimiento era un compromiso anterior a la covid-19 y en el que estaban trabajando. Tal y como ha avanzado la subdirectora “ya está aprobado, y se pondrá en marcha de manera progresiva”.
González del Yerro ha hecho hincapié en que esta nueva metodología de trabajo redundará en “un beneficio para todos” y que conseguirá que los informes que se elaboren desde la RedETS “sean de mejor calidad” y que se ajuste el plazo para su elaboración.
González ha añadido que el marco colaborativo que se ha presentado y que cuenta con la participación de agentes de interés como las organizaciones de pacientes, profesionales e industria “enriquecerán los informes”. Además, ha destacado que este es “un ejercicio claro de transparencia” por parte de la RedETS, tanto por la publicación del plan de trabajo que se va a llevar a cabo, así como por poder compartir los borradores de protocolos e informes con el objetivo de mejorarlos a consecuencia de las alegaciones que se realicen, siendo, además, “una forma de organizar la colaboración de los agentes de interés”.
La subdirectora general de la DGCCF aseguró que “creen que contar con más participación será mejor para todos” y se ha mostrado convencida de que la participación de la industria “es importante” y debido a ello se ha dispuesto su cabida en este proceso.
