Ante el anuncio de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, del fin de la obligatoriedad del uso de mascarillas en el transporte público el próximo 7 de febrero, la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) pide que “no se olvide” a las personas vulnerables y hace un llamamiento a la prudencia. Así lo ha manifestado la presidenta de la POP, Carina Escobar, quien también ha destacado que “las personas con necesidades crónicas de salud siguen siendo las más afectadas frente al virus Covid-19 y el resto de virus respiratorios”.
Por recomendación de los expertos, el uso de la mascarilla seguirá siendo obligatorio en los centros sanitarios, los servicios sanitarios, los establecimientos sanitarios como las farmacias y los centros sociosanitarios para los visitantes y los trabajadores. Esta decisión del Gobierno llega tras considerar que España tiene una situación epidemiológica-19 muy estable en todos los indicadores.
Ante esta flexibilización de las medidas de protección, y dada la época del año en la que nos encontramos, muy propicia para el aumento de infecciones respiratorias, la POP solicita a los pacientes crónicos, familiares y cuidadores que no relajen las medidas sanitarias de autocuidado.
En este sentido, y debido a la aparición de nuevas variantes y, la POP recomienda seguir teniendo prudencia y mantener la mascarilla en los ambientes sociales. “La realidad es que no hay obligación de quitarse la mascarilla, solo a usarla de manera responsable. Por ello, apelamos a la responsabilidad individual más que nunca, y pedimos a las autoridades sanitarias que se siga protegiendo a las personas más frágiles en estos momentos”, apunta la presidenta de la POP.
Además, desde la Organización de Pacientes subrayan la importancia tener al día la cartilla de vacunación y contar con las dosis de refuerzo adecuadas con el fin de seguir aumentando la inmunidad, sobre todo en los grupos de mayor vulnerabilidad como son los incluidos en el Grupo 7, con condiciones de muy alto riesgo y de mayor vulnerabilidad. “Tras casi tres años desde el inicio de la pandemia, la relajación de las medidas ha dado lugar a que exista una menor percepción del riesgo, pero las dosis de refuerzo siguen siendo necesarias para mantener el virus bajo control entre la población de riesgo”, señala Escobar.
Por último, desde la POP insisten en que es necesario que haya una escucha activa y comunicación hacía las asociaciones de pacientes con el objetivo de trabajar coordinadamente en la elaboración y actualización de estrategias nacionales de salud pública y en este caso para la vigilancia y control de la Covid-19.