Política

“Máximo respeto” del Gobierno a la decisión de Baleares de exigir el catalán a los sanitarios

El PP acusa en el Senado al Ejecutivo de Francina Armengol de haber cedido a las presiones de los nacionalistas “por mantener la poltrona”
Sánchez se dirige a la bancada popular durante su intervención en el Senado.

El Gobierno de España ve “desde el máximo respeto a las competencias autonómicas”, la decisión del Gobierno de Islas Baleares de obligar a todos los profesionales de las islas a contar con un nivel de catalán para acceder o mantener sus plazas en el sistema público.

Así lo ha asegurado la ministra de Sanidad Carolina Darias ante una pregunta formulada por la senadora del PP María Salom, en el pleno que ha tenido lugar este martes en la Cámara Alta. Salom había preguntado a la ministra por la valoración que desde el Gobierno de España se hace de la decisión del Gobierno Balear, anunciada la pasada semana, de reducir de 49 a 15 la lista de categorías sanitarias deficitarias a las que se les da un plazo de dos años para contar con el nivel adecuado de catalán.

Hasta los primeros días de este mes de febrero, el Gobierno Balear había mantenido su postura de exigir el catalán en casi todas las categorías de los procesos de estabilización del IB-Salud, salvo aquellos en los que existía un déficit de profesionales. En principio, en estas categorías abarcaban a 49 grupos profesionales, a los cuales se les daba un plazo de dos años para acreditar el nivel idiomático requerido. Sin embargo esta distinción quedó prácticamente eliminada después de que la propia presidenta Francia Armengol se reuniera con MES per Mallorca, sus socios nacionalistas en el Ejecutivo de las islas, que limitó la excepción a 15 categorías finalmente.

Para el PP esta situación, según explicó Salom en su intervención, no se basa en “la necesidad de garantizar la salud pública por encima de otra consideración”, sino que viene determinada “la prioridad del Gobierno de Armengol, por mantener la poltrona, con el apoyo de sus socios nacionalistas”.

Los populares, asegura la senadora, “no queremos hacer de la lengua una batalla”, pero consideran que la prioridad es “garantizar la atención sanitaria en una comunidad que figura a la cabeza de los déficits de profesionales sanitarios”. Igualmente Salom mantuvo la postura del PP de convertir a la lengua “en un mérito, en vez de en un requisito”.

Por su parte, Darias en la réplica indicó que el Gobierno de España “respeta la diversidad lingüística de este país, cumplimos con la Constitución y los estatutos de autonomías, y valoramos el uso de las lenguas cooficiales” y animó al PP a sumar en la mejora de la atención sanitaria en todo el país.

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