El debate sobre el importe que deben cobrar las oficinas de farmacia por el Programa Personalizado de Dosificación (SPD) ha vuelto a suscitarse a raíz de la resolución del Servicio Andaluz de Salud (SAS) con los requisitos para la selección de farmacias que presten servicio a residencias. Concretamente, por los apartados donde se afirma que “en ningún caso podrá resultar adjudicataria una oficina de farmacia cuya oferta por la elaboración del SPD (…) supere la cantidad de 20 euros, por paciente y mes”, y donde se fija una elevada puntuación a las farmacias que ofrezcan este servicio gratis.
Que la Administración no permita a las farmacias que quieran prestar servicio a residencias el cobro del SPD a más de 20 euros y que premie el ofrecerlo a coste cero ha llevado a la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) a presentar un recurso contra esta resolución del SAS, por considerar que dichas condiciones “atentan contra la dignidad del farmacéutico comunitario y vulneran su derecho al libre ejercicio de la profesión y la libertad de empresa de la farmacia”.
La profesión en su conjunto está de acuerdo con que las farmacias no deben ofrecer el SPD gratis, no sólo porque el servicio conlleva unos costes que hay que tratar de rentabilizar, objetivo muy difícil de cumplir, sino porque, si el ciudadano no lo paga, no sabe el valor que tiene. Así lo opina el presidente del Consejo General de Colegios de Farmacéuticos, Jesús Aguilar, para quien “lo que no se remunera no se valora; ya sea tanto por la Administración como por los propios pacientes”.
“Identificar y detectar un paciente crónico, polimedicado e incumplidor por parte del farmacéutico, así como elaborar el correspondiente SPD conlleva asociados unos costes materiales, de personal, de formación, de tiempo y de preparación que requieren de una retribución adecuada”, añade Aguilar.
Del mismo modo, SEFAC defiende que los servicios, “para ser verdaderamente profesionales, ofrecer las garantías de calidad necesarias y ser sostenibles en el tiempo, deben ser remunerados”. ¿Y quién lo paga? Pueden ir a cargo de la Administración, que se decida a concertar el servicio, que lo paguen los ciudadanos, entidades privadas, como una aseguradora, o bien puede ser un modelo de pago mixto.
El presidente del Consejo General se congratula ante el hecho de que haya comunidades autónomas que han entendido el valor del SPD e incluso lo remuneren, como el País Vasco. Aquí, desde el año 2009, las farmacias prestan este servicio a pacientes que reciben ayuda domiciliaria. Juan del Arco, miembro del Grupo de SPD del Colegio de Farmacéuticos de Vizcaya, explica a Diariofarma que, para el desarrollo del mismo, es necesario disponer de formación acreditada y cumplir con el Procedimiento Normalizado de Trabajo (PNT). De las 432 farmacias de esta provincia, 338 están acreditadas para prestar este servicio financiado, que ofrecen a casi 500 pacientes.
¿A cuánto cobrarlo?
Cada farmacia puede determinar libremente el importe al que cobrar el servicio, incluso puede decidir regalarlo. En cuanto a la cantidad a fijar, los colegios no pueden realizar recomendaciones sobre el precio de los servicios que las farmacias llevan a cabo, pues lo prohíbe la Comisión Nacional de Competencia, según recuerda Juan del Arco. Como referencia, puede servir el caso del País Vasco, donde cada farmacia participante en el programa público de SPD cobra por paciente y mes 31,16 euros. Sin embargo, Del Arco apunta que, según los cálculos realizados, para que el servicio sea sostenible, debería cobrarse a un importe mínimo de 35 euros. Este farmacéutico matiza que cada zona geográfica tiene su realidad particular, por lo que esta cantidad no tiene por qué ser extrapolable a todo el territorio.
La descripción de Del Arco sobre el desarrollo de este servicio no deja lugar a dudas sobre la notable inversión en tiempo y recursos que conlleva. “Es un servicio de alta cualificación profesional y, desde el punto de vista del uso de los medicamentos, lo más distinto que hay a un pastillero”, afirma. El proceso comienza con una entrevista personal de aproximadamente una hora, en la que el farmacéutico analiza la situación del paciente y la medicación que toma. A partir de la evaluación de todo ello, elabora un informe que se remite al médico, con quien la colaboración es fundamental. Tras el establecimiento de un plan terapéutico completo, el farmacéutico prepara y etiqueta la medicación. Todo este proceso será explicado en el curso que organiza el COF de Vizcaya para los próximos 26, 27 y 28 de septiembre, que tendrá un importante parte práctica, con dos casos a resolver.
Sobre los costes que implica el SPD, el Consejo de Colegios de Farmacéuticos de Cataluña realizó un estudio en el año 2013, publicado en Pharmaceutical Care, que calcula que el coste del servicio es de 19,85 euros al mes. Para el cálculo, se tuvieron en cuenta los costes de preparación, con un tiempo invertido de 12,5 minutos, los de intervención (7,7 minutos), las entrevistas (60 minutos) y el material. El trabajo concluye que el margen del medicamento en muchos casos no cubre los costes del servicio y propone que, en caso de que el servicio se concierte, su precio se calcule en función de su coste y los ahorros directos que genera al sistema de salud.
Por su parte, el Consejo Andaluz de Colegios de Farmacéuticos (Cacof) realizó una propuesta de fórmula de cálculo para el cobro del SPD, que tiene en cuenta la intervención farmacéutica y materiales utilizados. Así, las variables incluidas en la fórmula son el número de medicamentos, las incidencias (como el fraccionamiento de comprimidos, comunicación con el médico, entrevista inicial, preparación semanal, medicamentos no emblistables, cambio en la medicación), el número de blísters y el material usado en una semana.
¿Cobrar por un spd?Increíble pero cierto....habiendo pastilleros semanales,que te compras uno por 0,60€ y ya puedes hacer lo mismo que el spd para siempre y para rellenar un pastillero tampoco es que haya que ser catedrático en farmacia, ni tener un máster, cualquiera puede rellenarlo.
Pues te vas tú todos los domingos por la tarde a rellenarselo a quien lo necesite, puesto que una persona mayor de 80 años quizas no pueda hacerlo, a ver si tu tiempo y dedicacion no tiene precio.
Ni muchísimo menos es igual que un pastillero, esto demuestra la ignorancia con la que hablan algunos. Como bien dicen se requiere de personal cualificado , que si bien no hace falta ser catedrático, si hace falta personal para prepararlo debidamente y, ESO, no sale gratis, ni el transporte en caso de llevarlo, ni el tiempo dedicado a ello que , en caso de no haber otro personal, el Farmacéutico deja de ejercer otras actividades para dedicarle tiempo y recursos , por cierto de su bolsillo… Un pastillero por 0,60 centimos… que lo hace un chinito en el zulo de… Read more »
Falta el coste por transporte, porque los clientes quieren recibirlo en casa pero sin pagar el coste que esto conlleva, pero las farmacias tampoco quieren pagarlo.
Es un sinsentido en el que al final las farmacias no terminan de tener una imagen seria y profesional como se debería, ante necesidades tan primordiales y necesarias como son la atención sanitaria al paciente/cliente, porque al fin y al cabo la figura del farmacéutico es la más cercana a la del médico y por la que luchan a fin de cuentas cada día por transmitir a sus clientes.