El Consejo General de Colegios de Farmacéuticos ha presentado en el IX Congreso Nacional de Atención Farmacéutica, celebrado la semana pasada en Toledo, los resultados preliminares del estudio ASPIRA, que recoge información del servicio de dispensación a pacientes asmáticos y cuyos resultados preliminares demuestran que la intervención del farmacéutico hace incrementar la calidad de vida de los pacientes y mejora el control de la enfermedad.
El estudio, que es la primera acción del proyecto Hazma sobre servicios profesionales en la oficina de farmacia, se ha llevado a cabo en 149 farmacias de toda España y 832 pacientes. Cada uno de ellos realizó tres visitas de 30 minutos, una cada mes y medio.
La intervención del farmacéutico logró un aumento relativo del cumplimiento del tratamiento mayor del 30% entre la segunda visita y la visita final. De igual forma, se registró una mejoría en el control del asma.
La información recogida también revela una mejora notable de la calidad de vida, registrándose un incremento de 8,6 puntos en la Escala Visual Analógica después de la intervención. Los Problemas Relacionados con el Medicamento (PRM) más detectados fueron los de incumplimiento y administración errónea, mientras que el Resultado Negativo asociado a la Medicación (RNM) más frecuente fue el de una inefectividad cuantitativa. Las intervenciones propuestas con mayor frecuencia fueron la Información Personalizada del Medicamentos (IPM) y la educación sanitaria.
Los resultados preliminares de ASPIRA también revelan la buena valoración por parte de los pacientes, el 90% de los cuales consideró que la explicación del farmacéutico les ayudó mucho o bastante a mejorar su técnica de inhalación. El mismo porcentaje vio mejorado el control global del asma gracias al farmacéutico.
También destaca que la mediada de edad de los pacientes fue de 54 años; siendo mujeres el 48,7% frente al 51,3% de hombres. Asimismo, un 26,7% presentaron más de tres enfermedades y un 26,3% tomaba más de 5 medicamentos.
En cuanto al tratamiento más utilizado frente al asma fue la combinación de corticoides inhalados/agonistas beta-adrenérgicos de acción prolongada (CI/LABA) en un 55,1% de los pacientes; seguido por anticolinérgicos y agonistas beta-adrenérgicos de acción prolongada (LABA) en monoterapia (11,3 % y 11% respectivamente). El 70% de los pacientes utilizaron inhaladores de polvo seco.