Artículo de opinión de Nicolas Toro Torres, socio de TSL Consultores
El uso del Big Data en el sector retail se ha generalizado en los últimos años con objeto de ser más precisos en la toma de decisiones, y así minimizar riesgos. Existen múltiples facetas de la actividad empresarial a las que aplicar el uso del Big Data, no obstante, en el presente artículo me centraré en el uso de estos datos para la toma de decisión de la localización de un negocio (“location intelligence”). Esto, llevado a nuestro sector, se aplica a las operaciones de traslados de farmacias y nuevas aperturas.
Como sabemos, la ubicación del local de una farmacia es uno de los factores determinantes en su éxito. Ésta, junto con el horario de apertura, los servicios, el surtido, y el personal, conforman los pilares básicos de una farmacia de primer nivel. No obstante, el primero y más importante suele ser la ubicación, que nos va a facilitar el desarrollo de todos los demás.
En los últimos diez años, he podido comprobar como la toma de decisión de la localización de un traslado de farmacia (o una nueva apertura) ha pasado de basarse en la intuición, a basarse en el análisis de datos objetivos. Así, a día de hoy, disponemos de herramientas que nos permiten conocer multitud de datos del área de influencia del local en el que queremos instalar una farmacia. Por ejemplo, podemos obtener datos demográficos (población censada, población flotante, turistas pernoctantes, pirámides de edad, número de personas por hogar,…), datos socioeconómicos (renta per cápita, renta disponible por hogar, número de viviendas, …), transacciones comerciales y procedencia de los compradores, tráfico peatonal, tráfico rodado, y horarios de mayor afluencia. De esta manera, conocemos de antemano qué tipo de público reside, trabaja y transita alrededor del local en cuestión. Y podemos hacer análisis comparativos con otras ubicaciones.
Además, ya no es necesario acudir al INE, al Catastro o a la Agencia Tributaria para sacar con mayor o menor acierto esta información, sino que disponemos de aplicaciones tecnológicas muy desarrolladas que nos facilitan los datos de manera ordenada en base a los parámetros que le proporcionemos (por ejemplo, población censada y población flotante existente a 5 minutos andando del local).
La utilidad de esta información es indudable, no solo para la toma de decisión de la ubicación del local, sino para poder realizar una predicción del potencial de crecimiento de la farmacia. Además, nos ayuda a conocer las categorías de producto que tienen mayor probabilidad de éxito en esa ubicación. Información de gran utilidad en el entorno súper-competitivo en el que se mueve la farmacia actual.
Por todo ello, teniendo en cuenta la inversión que supone el traslado o apertura de una farmacia, y el esfuerzo material y físico que supone ponerla en funcionamiento, es más que recomendable realizar un análisis previo de la ubicación con las nuevas herramientas tecnológicas a nuestro alcance. La clave del éxito de la operación nos la puede proporcionar el Big Data.
Nicolas Toro Torres es socio de TSL Consultores