La Federación Europea de la Industria Farmacéutica y Asociados (Efpia) ha respondido de forma casi inmediata a la Estrategia Europea para las Ciencias de la Vida anunciada el pasado miércoles por la Comisión Europea. De entrada, aseguran, “el balance es muy positivo” para las empresas, pero avisan, que solamente tendrá viabilidad si se asume una “inversión decidida” que aporte viabilidad a la propia estrategia y contribuya a la mejora de la productividad de la Unión.
Junto a ello, desde la Efpia se matizan otras cuestiones. Una de ellas es el enfoque en facilitar la realización de ensayos clínicos en toda Europa, para lo que, aseguran “es fundamental para aumentar el número de plazas de ensayo disponibles para los ciudadanos europeos”.
Igualmente reclaman un mayor apoyo a las pymes y mejoras en el marco regulatorio, que se deberá realizar en el marco de la nueva Ley de Biotecnología prevista para este mismo año y la creación de la Junta de Coordinación de Ciencias de la Vida, algo que ya recoge la Estrategia y que desde la industria “es especialmente bienvenida y esperamos que sea fundamental para traducir la estrategia en acciones rápidas y tangibles”.
En el argumento de la Efpia si se combina con una mayor inversión en medicamentos innovadores y un marco de propiedad intelectual competitivo a nivel mundial, la estrategia “puede ayudar a que Europa recupere su posición como líder mundial en ciencias de la vida”.
Nathalie Moll, Directora General de EFPIA, considera que “es sumamente alentador que los responsables políticos de la UE reconozcan la necesidad de revertir las tendencias a la baja y busquen activamente nuevas inversiones”.
“El sector en Europa ha estado en crisis durante dos décadas y la Estrategia ofrece buenas noticias en un momento en que más se necesitan. Para que Europa sea verdaderamente líder, necesita invertir en medicamentos, atraer inversiones, acelerar la conversión de esas inversiones en nuevos tratamientos y crecimiento económico, además de garantizar que los pacientes de toda la UE tengan acceso a ellos al mismo ritmo que otras regiones”, ha indicado Moll.