El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha reducido el objetivo de prescripción por principio activo (PPA) planteado a los médicos en el contrato programa de 2019 hasta el 85% del total de recetas desde el 95% que se encontraba anteriormente. El objetivo del cambio sería, tal y como ha podido saber Diariofarma “relajar la presión” sobre los médicos prescriptores.
Esta medida es una de las más llamativas que se recogen en el ámbito de la prestación farmacéutica del contrato programa del SAS. Este contrato también incluye la obligación de alcanzar una meta superior al 30% de uso de medicamentos biosimilares de insulinas, heparinas y condroitín sulfato.
Otros aspectos que se recogen en el acuerdo es el incremento de la calidad en la selección de medicamentos. Para ello se ha establecido como objetivo mejorar en un 5% el resultado de 2018 en el Índice Sintético de Calidad (ISC-AH). A este respecto, se analiza el uso de los medicamentos considerados más eficientes de entre todos los de su grupo terapéutico.
La reducción del riesgo por efectos adversos de medicamentos en pacientes crónicos y la revisión de los potenciales problemas de seguridad derivados de la prescripción es otro de los objetivos establecidos en el ámbito del medicamento, entre los que se encuentra también no superar el presupuesto asignado para acuerdos de consumo en farmacia (capítulo IV recetas).
En los últimos años, desde 2012, el porcentaje de PPA alcanzado en la región andaluza había entrado en una fase horizontal al haber alcanzado el máximo ténicos en cifras próximas al 93%.