El Servizo Galego de Saúde (Sergas) y el Colegio Oficial de Farmacéuticos (COF) de Pontevedra han firmado un convenio de colaboración para permitir que los pacientes del área sanitaria viguesa que precisen de un medicamento de forma urgente pautado por el médico puedan acceder al mismo, aunque deberán contar con la autorización de un profesional de Farmacia de la Estructura Organizativa de Gestión Integrada (EOXI) antes de ser adquiridos en la oficina de farmacia. Entre los medicamentos incluidos en el nuevo protocolo se incluyen los anticoagulantes, antiagregantes e inmunosupresores, los cuales deberán estar incluidos en la cartera del Sergas para que puedan ser adquiridos en la farmacia.
"Actualmente, se trata de un proceso que se lleva a cabo desde la Atención Primaria", explican desde el Sergas, "y existe un plazo establecido de 72 horas para que se pueda recoger el fármaco en la farmacia. El problema aparece en los horarios de tarde o los días no laborables, en aquellos casos en los que el paciente requiere una dispensación urgente".
Gracias al nuevo sistema, del que Galicia se convierte en comunidad pionera, los farmacéuticos de guardia en los hospitales Álvaro Cunqueiro o Meixoeiro, pueden realizar la validación de forma automática y resolver las incidencias que puedan darse los fines de semana o festivos, entre otras situaciones. "Esto será así siempre que se trate de una medicación urgente que no pueda esperar la autorización del centro de salud", explican, y añaden que "lo más importante es que se mejora la seguridad del paciente en el momento de obtener el medicamento en la farmacia y no sea el enfermo el que se vea obligado a solventar el problema", explica Guadalupe Piñeiro, jefa del Servicio de Farmacia del Hospital Álvaro Cunqueiro.
El nuevo modelo de atención, fruto de una colaboración entre el Sergas y el COF, con el apoyo de los farmacéuticos de hospital, lleva en funcionamiento poco más de un mes y a través de él ya se ha atendido a una treintena de pacientes.