La modificación en el patrón demográfico y en el perfil epidemiológico de las enfermedades ha traído como consecuencia una población cada vez de mayor edad, pero también con mayor número de enfermedades crónicas. Esta longevidad que, a priori, se considera fruto de los avances sanitarios y de la mejora en la calidad de vida de las personas, no siempre viene acompañada de una buena salud o de una funcionalidad óptima de la persona. La cronicidad, en muchas ocasiones, se asocia a la fragilidad y a la dependencia, lo que supone un verdadero reto, no sólo para nuestro sistema sanitario, sino también para los servicios sociales.
Este ha sido el hilo conductor de la IV Reunión de directores generales de farmacia del norte de España, organizada por Otsuka Pharmaceutical, la Consejería de Salud, FINBA e ISPA y que, bajo la temática ‘Cambio de paradigma en Salud: Paciente pluripatológico y Cronicidad’ ha reunido en Oviedo a los máximos responsables de Farmacia de País Vasco, Galicia y Principado de Asturias: Montserrat Bango Amat, directora general de Política y Planificación Sanitarias de la Consejería de Salud del Principado de Asturias, Silvia Reboredo García, subdirectora Xeral de Farmacia de la Conselleria de Sanidade de la Xunta de Galicia y Jon Iñaki Betolaza, director de Farmacia de la Consejería de Salud del Gobierno de Euskadi.
Durante la sesión, los tres ponentes han compartido las experiencias en sus comunidades autónomas en la atención de la persona con pluripatología y cronicidad, así como los retos actuales que plantea esta asistencia. En concreto, Montserrat Bango ha destacado la importancia de estratificar a la población por grupos de morbilidad ajustados ya que, entre otros aspectos, “permite a los profesionales (sanitarios y no sanitarios) que atienden a pacientes crónicos clasificarlos en función de su complejidad y, por ende, determinar las necesidades de salud de cada uno”.
Además, la directora general de Política y Planificación Sanitarias del Principado de Asturias ha informado de dos nuevos proyectos que se están llevando a cabo en las oficinas de farmacia de la región y que evidencian la colaboración y “buena relación” que hay entre los centros de salud y las oficinas de farmacia.
Se trata de la iniciativa ‘Solupharmas’, un proyecto por el que las incidencias en la dispensación de medicamentos ya no se resuelven solo en los centros salud sino que se hace contando con las oficinas de farmacia y que ha resuelto más de 50.000 consultas con buenos indicadores de calidad y eficiencia; y ‘Dormir sin pastillas’, un programa en el que están implicados los médicos de familia y los farmacéuticos y que tiene como objetivo mejorar la salud de las personas de entre 18 y 75 años mediante la reducción de las dosis diarias de benzodiacepinas que se utilizan inadecuadamente para tratar el insomnio.
Del mismo modo, Silvia Reboredo ha comentado el Programa Mejora de la calidad en la atención al paciente crónico y polimedicado implantado en Galicia y por el cual se han desarrollado varias líneas estratégicas de actuación en cuanto a la revisión y conciliación de la medicación del paciente crónico, con el fin de mejorar la seguridad en el uso de los medicamentos y los resultados en salud y por extensión mejorar su calidad de vida. Asimismo, ha subrayado la importancia que tiene el Programa de Atención Farmacéutica en Centros Sociosanitarios.
“La conciliación de la medicación es una práctica que se ha desarrollado con el objetivo de mejorar la comunicación y disminuir los errores de medicación en las transiciones asistenciales, garantizando que el paciente recibe en cada momento la medicación correcta a lo largo de todo el proceso asistencial. En Galicia se implanta este programa en el ámbito de la atención primaria, como un proceso multidisciplinar, que incluye al farmacéutico de atención primaria y al médico de familia, y en el que también colabora la enfermería de atención primaria. Es un proceso que garantiza la continuidad asistencial, y que inexcusablemente debe realizarse en colaboración con los profesionales de atención hospitalaria, para así poder resolver las posibles discrepancias o problemas relacionados con los medicamentos identificados”, ha detallado.
Asimismo, comenta que en Galicia se han puesto en marcha programas de seguimiento farmacoterapéutico del paciente crónico, para garantizar la efectividad y seguridad de los tratamientos, pero también se están fomentando programas de acercamiento del medicamento al entorno/domicilio del paciente, a través del desarrollo normativo de los supuestos especiales de entrega de medicamentos, previstos en la Ley de Ordenación Farmacéutica de Galicia, garantizando en todo momento la necesaria atención farmacéutica.
Los pacientes crónicos complejos requieren de una atención individualizada y, por ello es importante conseguir integrar los procesos farmacéuticos en la actividad asistencial, y coordinar la farmacia comunitaria, la farmacia de atención primaria y farmacia hospitalaria con el sistema sanitario, para hacer frente al reto de la cronicidad y el consecuente incremento de la demanda asistencial.
Por su parte, el director de Farmacia de la Consejería de Salud del Gobierno de Euskadi, Jon Iñaki Betolaza, ha desgranado las diferentes acciones que desde su comunidad se llevan a cabo para atender al paciente con pluripatología y crónico, señalando que el coste que supusieron las personas polimedicadas en el año 2023 ascendió a casi 393 millones de euros, un 65% del importe total de los medicamentos consumidos.
“Desarrollamos toda una serie de cuestiones relacionadas con la atención farmacéutica de estas personas, tanto desde el ámbito del propio sistema de salud a través del Servicio de Farmacia de Atención Primaria, como a través de la colaboración conjunta con las oficinas de farmacia y, también, de convenios de colaboración con los colegios vascos de farmacéuticos”, ha recalcado Betolaza, quien, además, ha comentado que, bajo el lema ‘Avanzar en Bienestar’, el Ejecutivo vasco impulsa la integración de la farmacia como un agente más del sistema sanitario en coordinación y colaboración con el resto de niveles asistenciales.
Finalmente, los expertos han insistido en la necesidad de seguir adaptando la atención sociosanitaria a las necesidades concretas de estos pacientes, impulsar nuevas iniciativas de colaboración entre profesionales sanitarios y las farmacias, así como mejorar la dispensación de medicamentos, la conciliación de terapias para garantizar la seguridad y eficacia en la atención y la adherencia a los mismos, ya que se estima que en los países industrializados hasta el 50% de las personas con enfermedades crónicas son no adherentes.
“En Otsuka Pharmaceutical nos sentimos orgullosos de haber contribuido a la organización de esta jornada en la que se ha facilitado el intercambio de experiencias y buenas prácticas entre los principales responsables autonómicos del sector, en beneficio de una mejor atención a los pacientes pluripatológicos. Nuestro compromiso como empresa farmacéutica innovadora es seguir apoyando iniciativas que fomenten la integración de la farmacia en el sistema sanitario y promuevan una atención más segura y eficiente para el paciente”, ha señalado José Manuel Rigueiro, director general de Otsuka Pharmaceutical.