El consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha confirmado, como había publicado en exclusiva Diariofarma, que están trabajando en la eliminación del cupón precinto como prueba de dispensación de recetas del Sistema Nacional de Salud. Eso sí, también ha señalado que aunque el proceso “podría parecer sencillo” puede haber “complejidad administrativa” para llevarlo a cabo.
El consejero ha explicado que están trabajando en llevar a cabo un proyecto piloto que determine si es posible hacerlo a lo largo marco de un encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum, con la colaboración de Bidafarma.
Ruiz Escudero también ha señalado que “la complejidad viene más por la parte administrativa por el hecho de que la administración tenga que pagar al farmacéutico por el medicamento dispensado”. Es decir, que a día de hoy podría ser complicado que la Intervención de la Administración autorice un pago a cargo de fondos públicos si no hay una prueba irrefutable de que el farmacéutico ha dispensado el medicamento en una receta oficial del Sistema Nacional de Salud.
La cuestión es que, aunque con probabilidad remota, podría facilitarse un fraude por facturación doble. Por un lado, a través de la serialización única y, por otra, a través del cupón precinto que deberá estar presente en los medicamentos hasta, al menos, febrero de 2024, por lo que sería muy difícil de detectar. En este sentido, es de destacar que el posible fraude sería en un pequeño número de casos vinculados a las escasas recetas en papel aún hoy circulan.
En cualquier caso, el consejero ha confirmado que están trabajando y si el piloto fuera satisfactorio y se resolvieran todas las cuestiones de gestión, se extendería a todas las farmacias.