El consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, es partidario de otorgar a las farmacias comunitarias un papel relevante en la asistencia domiciliaria a pacientes. Así se recoge en el Anteproyecto de Ley de Farmacia de la región que será aprobado por el Consejo de Gobierno en su próxima reunión en la primera de septiembre, tal y como desveló en un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Forum, que contó con la colaboración del Grupo Bidafarma.
Ruiz Escudero se mostró convencido de que todos los grupos apoyen la nueva norma porque la actual “es muy antigua” y con la nueva Ley de Farmacia “se adapta el papel de la farmacia a los tiempos que corren”. Según el consejero “hay que dar potencial a las farmacias” y aprovechar la “distribución territorial” de las mismas y el apoyo y asesoramiento que prestan a los pacientes.
A este respecto, consideró necesario “definir el papel de cada profesión sanitaria en la atención domiciliaria, que va a ser nuestro gran hospital” para evitar, sin mencionarlo, los conflictos como el que actualmente enfrenta a enfermería con la farmacia.
También en el ámbito de la farmacia, el consejero explicó que, aunque aún no se ha reunido la comisión bilateral entre las consejerías de Hacienda y Sanidad y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM), se sigue trabajando para hacer posible que eche a andar lo antes posible y “tratar de reconducir las medidas de que se pusieron con la crisis y que pueden afectar a la viabilidad de las oficinas de farmacia”, explicó.
En relación a los anuncios que ha hecho el nuevo Gobierno y, en concreto, acerca de la revisión de los copagos y la universalidad, Ruiz Escudero explicó que si “hay posibilidad presupuestaria, fruto de la bonanza de la gestión de Rajoy en estos años, para eliminar el copago”, ellos no tienen mayor problema en hacerlo si se acompaña de la partida presupuestaria correspondiente. Con respecto a la universalidad, explicó que “no era un debate que estuviese en la primera línea del mundo sanitario”. Por ese motivo, criticó la convocatoria de un Consejo Interterritorial del SNS (CISNS) para tratar en exclusiva ese punto sin abordar la financiación, la escasez de profesionales o el fin del fondo de cohesión. Por ese motivo tildó de “mediática” y no de “necesidad” la convocatoria de dicho pleno del CISNS. Más allá, criticó la falta de memoria económica y de datos de afectados y su coste en la documentación que se les facilitó.
Igualmente, aseguró que el borrador de texto legal que les presentó el Ministerio “confunde sanidad universal con el aseguramiento”, de modo que “cualquier persona que pise España tiene los mismos derechos que los contribuyentes y es una autopista de cuatro carriles para el turismo sanitario”.
El presidente regional, Ángel Garrido, fue el encargado de presentar a Ruiz Escudero, de quien valoró su “capacidad de diálogo” y aseguró que “representa a la perfección la política de entendimiento con los profesionales públicos”. Además, le mostró como un buen gestor, algo necesario ya que su departamento es responsable del 41% del presupuesto público madrileño, “casi la mitad del total”, indicó Garrido.
En relación con los presupuestos, el consejero también reclamó una revisión del modelo de financiación autonómica, que supone que Madrid deje de recibir cada año 1.400 millones de euros y reclamó un “nuevo sistema de financiación que no desincentive a quienes mejor lo están haciendo”. Ruiz Escudero también puso de manifiesto el esfuerzo realizado por la administración madrileña “en los peores años de la crisis” y explicó que entre 2009 y 2014 se habían incrementado los actos quirúrgicos y sanitarios en la región.
Ruiz Escudero defendió la colaboración público privada ya que la sanidad privada “sigue siendo un socio imprescindible para la sanidad pública”. A este respecto consideró necesario “controlar la actividad, los indicadores de salud y la satisfacción de los pacientes. Si se mueve en los mismos rangos de los hospitales públicos se puede seguir practicando”.
Con respecto a los avances en historia clínica electrónica, que alcanzará a todos los hospitales en 2019, y que debería llegar también al ámbito privado ya que la historia clínica es del paciente.
Por último, también avanzó que están trabajando en la puesta en marcha de BioMad, una entidad que busca potenciar a Madrid como “región de atracción en asistencia y en investigación”. El objetivo es “coordinar la investigación” y canalizar la información y la obtención de fondos europeos.
El cierre del acto fue realizado por el presidente del Grupo Bidafarma, Antonio Pérez Ostos, quien se mostró satisfecho por las afirmaciones “interesantes” hechas por el consejero en relación al carácter asistencial de la farmaica.
Pérez Ostos valoró positivamente la promoción de la farmacia hacia la asistencia sanitaria y que se vea a estos establecimientos como un lugar donde atender de mejor manera al paciente.
“Apostamos por una farmacia centrada en el paciente, es la sanidad del futuro”, explicó el responsable de Bidafarma. Por ello, puso a disposición de las farmacias la capacidad innovadora de Bidafarma “para contribuir a mejorar la salud de las personas y la sostenibilidad del sistema sanitario”, aseguró.
