Otra de 2020: las subastas andaluzas de medicamentos regresan

Artículo de opinión de José María López Alemany, director de Diariofarma.

Pocas cosas le faltaban a este 2020 para ser el año más recordado por todos los que hemos tenido la experiencia de vivirlo. Y una de ellas, en el ámbito farmacéutico es la vuelta de las subastas andaluzas de medicamentos. Unas subastas que justo este diciembre pasarían a ser historia.

La nueva subasta trata de evitar los graves perjuicios que producía la anterior. Creo que es algo objetivo decir que el nuevo modelo de subastas es sensiblemente menos dañino para el sector que el previo. Pero aún así no deja de suponer un perjuicio para farmacéuticos, laboratorio y pacientes que ven limitada su actividad o sus derechos en relación con los del resto de España.

Por ello, tras dos años de retirada paulatina no deja de ser sorprendente que se vuelva a poner en marcha. Como ha dicho la Confederación Empresarial de Oficinas de Farmacia de Andalucía (Ceofa), es un incumplimiento de una de las principales promesas electorales de Juan Manuel Moreno en las elecciones de 2018.

A lo largo de este jueves, tras dar en exclusiva la noticia del nuevo modelo, en Diariofarma hemos tenido oportunidad de hablar con diferentes agentes del sector. Entre ellos, con el presidente del Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (Cacof), Antonio Mingorance, y el presidente de la Asociación Española de Genéricos (Aeseg), Raúl Díaz-Varela. Ambos, al igual que los representantes de Ceofa, rechazan este modelo y dan razones que yo creo que son suficientemente consistentes.

Aeseg pone de manifiesto que se trata de una medida que no aporta nada más que un ahorro de costes, pero puede ser lesiva para el sector. Además, con una buena dosis de sentido común, recuerda que en breve está prevista la aprobación por parte del Ministerio de Sanidad del Plan de Genéricos, un plan que establecerá pautas y claves del mercado de genéricos para toda España. La patronal de genéricos pide que se espere a ese plan para que las medidas a implantar sean a nivel nacional. Por eso no parece entendible que volvamos a fraccionar el mercado farmacéutico a la búsqueda de unos ahorros que, siendo importantes, suponen un grave perjuicio para todo el sector.

Por su parte, el presidente del Cacof, también ha querido plantear su “rechazo visceral” a la puesta en marcha de este sistema. Mingorance recuerda que desde la Administración pidieron a los farmacéuticos un esfuerzo para aliviar las cuentas del Servicio Andaluz de Salud (SAS), algo a lo que se negaron.

A la vista de la configuración del nuevo sistema parece como si el Gobierno andaluz tuviera dudas y se debatiera entre cumplir la promesa realizada e intentar obtener los recursos que las subastas le proveen. Y por ello, parecen dispuestos a reducir a la mitad los ingresos a obtener, ampliar la concurrencia y eliminar las exclusividades, permitir a las farmacias manejar el stock o que los pacientes puedan seguir con sus tratamientos. Todas estas medidas, con las subastas en marcha serían bienvenidas, pero ante la perspectiva de su eliminación, esto supone un jarro de agua fría.

Yo creo que la petición de Aeseg de esperar al Plan de Genéricos del Ministerio es muy razonable. También creo que el gobierno regional debería darle una vuelta a la fragmentación del mercado que vuelven a propiciar y los problemas que ello crea, así como los efectos directos de las subastas sobre el sector.

Sé que hablamos de mucho dinero, pero también sé que afecta a un sector que lo ha dado todo durante la pandemia. ¿Qué decir del trabajo que han desarrollado los farmacéuticos, al igual que el resto de los profesionales sanitarios? ¿Qué decir del trabajo que han realizado las compañías farmacéuticas en nuestro país? Muchas de ellas modificando sus planes de producción para producir la hidroxicloroquina que se pedía en los primeros meses de covid-19 o los relajantes musculares que faltaban en muchas UCI y desviviéndose día y noche, fuera martes o domingo, para que en nuestro país no faltara, como así ha sido, ningún medicamento para ningún paciente.

Creo que todo eso también hay que valorarlo por parte de las administraciones y demostrar agradecimiento. Por ello, no veo justo ni adecuado que la primera medida que llegue, incluso con la pandemia todavía entre nosotros, sea un nuevo revés. Espero que el Gobierno recapacite y no solo deje en stand by el cambio de modelo, sino que eliminen del todo la normativa de las subastas de la legislación farmacéutica andaluza.

José María López Alemany es director de Diariofarma.