El Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña (COFC) ha presentado este martes una nueva campaña de concienciación centrada en la salud mental de la población en el contexto pospandemia. El objetivo es poner el foco de atención ante una realidad sociosanitaria, que desde las farmacias también se percibe, y que tiene vinculación tanto con el consumo de determinados medicamentos como con determinados segmentos de población.
En una consulta reciente al sector, el 98% de los farmacéuticos creen que la salud mental ha empeorado a nivel general tras la pandemia. Entre los medicamentos que han crecido en la dispensación están los ansiolíticos, los antidepresivos o los preparados de fitoterapia a base de plantas medicinales.
Los farmacéuticos aportan además en esta encuesta algunas estrategias para tratar este problema desde la farmacia, que es el primer punto sanitario y el más accesible al ciudadano. Tocan cuestiones como la adherencia al tratamiento, el apoyo, información y consejo en torno a estas medicaciones, las explicaciones en torno a efectos o reacciones, la vigilancia y el seguimiento farmacoterapéutico o la escucha activa y normalización de esta enfermedad, que afecta a buena parte de la población, y en la que el apoyo del entorno tanto social como familiar es fundamental.
En el transcurso de esta presentación hemos contado con la presencia de Héctor Castro Bernardino, presidente del COFC; Rosa Álvarez Prada, decana del Colegio Oficial de Psicología de Galicia; Ana González Novás, presidenta de la Fundación para el Cuidado de la Salud Mental en Galicia (SALMA Galicia), que han compartirdo sus impresiones desde los colectivos en los que trabajan.
Desde el COPG, los psicólogos creen que las farmacias “son un buen termómetro para detectar estos problemas” porque son el primer punto al que acude el ciudadano, recogen las inquietudes psicológicas de muchas personas. “Un 30% de las personas van a experimentar alguno de estos problemas a lo largo de su vida”. La decana del Colexio Oficial de Psicoloxía de Galicia destacó que “estamos viviendo el peor momento de salud mental de nuestra historia”, lo vemos en tasas de suicidio, afectación en niños y jóvenes, y a esto se añade ahora la crisis económica y una guerra. El colectivo pone de manifiesto que en Galicia hay menos recursos para atender a la salud mental que en otros países europeos, y que las personas con menos recursos tienen más dificultades para acceder a esta ayuda.
En Salma Galicia están luchando por actualizar la legislación, “necesitamos un modelo de gestión y unas líneas claras en materia de salud mental”, indican, “es un tema de salud pública”. El colectivo indica que las asociaciones siempre van a estar ahí, pero tiene que haber recursos públicos que permitan trabajar en prevención y coordinación. “La mitad de los trastornos” recuerdan, “aparecen antes de los 14 años, la especialidad de psiquiatría infanto-juvenil es muy reciente. El diagnóstico precoz es fundamental”.
La campaña estará en las farmacias en estos días a través de carteles informativos, bolsas y consejos difundidos a través de las redes sociales.