Castilla-La Mancha se considera una zona de alta prevalencia de esclerosis múltiple, que se estima actualmente en 140 casos por 100.000 habitantes. En la comunidad autónoma se están desarrollando diversos proyectos para la mejor atención de estos pacientes a través de la implantación de unidades multidisciplinares y consultas monográficas, que facilitan la valoración especializada y el acceso a los nuevos tratamientos.
Uno de estos proyectos, realizado por los servicios de Neurología y Farmacia del Hospital de Castilla La Mancha-Centro (Alcázar de San Juan) acaba de recibir el V Premio Novartis-IESE a la excelencia operativa, en la categoría de iniciativas innovadoras. Se trata de un programa de atención integral a estos pacientes, dirigido solucionar los “pain point” o cuellos de botella identificados trás el análisis del PJ con metodología Lean para la optimización.
Alejandro Marcos, farmacéutico del hospital manchego a trabajado junto la neuróloga Marisa Moreno en la implantación de un nuevo sistema, que comenzó a diseñarse en 2022, se inició la implantación en el verano de 2023 y que actualmente ya está plenamente operativo.
El objetivo del proyecto era la aplicación de la metodología Lean “para mejorar la capacidad y el flujo de trabajo, así como para incrementar el nivel de satisfacción de pacientes y empleados”, explica Marcos, y a través de él, “la detección de los problemas y las oportunidades de mejora existentes en la Unidad”.
Para el diagnóstico de la situación actual se empleó la herramienta de VSA, en la que se mapea el circuito asistencial y se detectan los puntos débiles del flujo, buscando mejoras en productividad, eficiencia y calidad del servicio al paciente. Se establecen también unos índices de seguimiento o KPIs que se medirán cada 3 meses durante 1 año para evaluar el éxito del proyecto.
Según los datos del proyecto, las mejoras han sido importantes. De una situación en la que se generaban duplicadas se ha obtenido una mejora en el tiempo de respuesta al paciente de un 85%, se ha logrado la comunicación directa entre servicios y de paso, la eliminación del papeleo previo a la hora de decidir si un paciente tiene que iniciar un determinado tratamiento. Igualmente se ha alcanzado una reducción de ingreso para el diagnóstico, con un beneficio económico estimado de unos 78.200 euros y más de 540 horas de consulta de Neurología.
Según explica este farmacéutico, “el papel de la farmacia es fundamental”, puesto que “somos responsables de todos los tratamientos”, unos tratamientos que muchas veces se dirigen a pacientes complejos y que pueden estar sujetos a condiciones especiales de acceso o financiación.
Igualmente, según explica Marcos, la experiencia multidisciplinar “ha sido muy buena”. De hecho, Farmacia Hospitalaria ya se está planteando extender esta colaboración para atender a los pacientes del servicio de Reumatología. Igualmente, Marcos indica que “este proyecto es plenamente trasplantable a otros hospitales”. El centro de Alcázar de San Juan tiene una población de referencia de unas 200.000 personas, pero puede ser aplicable “a cualquier tipo de centro sanitario”.
Igualmente, de cara al paciente, aunque el proceso aún no se ha evaluado de forma técnica, Marcos explica que “el feedback con los pacientes ha sido muy positivo”. “Se sienten mejor acompañados”, asegura.