El pleno del Congreso de los Diputados ha admitido a trámite la ley de ayuda a pacientes con ELA y otras enfermedades neurodegenerativas propuesta por los socios de Gobierno, PSOE y Sumar. Esta norma se suma a las ya presentadas por el Partido Popular y Junts, sobre la misma cuestión, o similar, en menos de dos meses.
El matiz, o al menos así lo ha querido señalar la portavoz adjunta del Grupo Parlamentario Socialista, Maribel García, es que este texto “responde y atiende las necesidades perentorias de todas las personas con enfermedades neurodegenerativas, como el ELA, pero también el Alzheimer, el Parkinson o la esclerosis múltiple entre otras”. Todos los pacientes que padecen estas patologías “requieren de una respuesta integral, coordinada y eficiente”.
La ley, al igual que las anteriores plantea una simplificación de tiempos y trámites, y al igual también que las normas precedentes, se acreditará la discapacidad en un grado igual o superior al 33%. Como novedad este texto alude a las ayudas de la electrodependencia, dirigidas a las personas que dependen de una máquina conectada a la red eléctrica.
La norma además establece que en un plazo máximo de seis meses tras la entrada en vigor de esta ley se elevará al Consejo Territorial de Servicios Sociales, una propuesta para la creación de residencias especializadas.
Aunque la norma del PSOE ha contado con el apoyo mayoritario, no se ha librado de las críticas de otras formaciones políticas que consideran que el llevar no dos, sino tres trámites para la confección de otras tantas leyes que vienen a ser similares, solo complican y ralentizan el proceso.
Así lo ha señalado la popular Sandra Fernández que considera que lo que pretende esta proposición “es desviar la atención sobre la ELA, presentando una iniciativa que no se circunscribe a ella”. Desde el PP se ha señalado, que “estamos completamente de acuerdo en atender las circunstancias de otras enfermedades”, pero consideran que “podrían haber enmendado nuestra propuesta”, la primera que se hizo, “sin necesidad de presentar otro texto”.
Desde Junts también se ha criticado la presentación de esta norma que “ignora la singularidad de la ELA”. Desde Vox, que no tiene previsto presentar otro texto más, esta concatenación de proposiciones “son símbolo del abandono político de la ELA”, según Rocío de Meer, quien ha indicado que el único interés de su grupo es que “no se pierda más tiempo”.
Futuro
En su turno de intervención, el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy ha mostrado su convencimiento de que esta norma del PSOE verá la luz en esta legislatura. Igualmente ha reclamado celeridad a los diputados “porque las personas enfermas de ELA y sus familias no disponen de tiempo”.
Sobre la concatenación de propestas, el ministro considera que el objetivo debe ser “aunar esas propuesta y conseguir una que refleje el consenso más amplio posible”.
También la ministra de Sanidad, Mónica García, se ha referido desde Bruselas a esta norma señalando en la misma dirección que su compañero de Consejo de Ministros, señalado que de todo esto “surja una ley integral, no solamente para la ELA, sino también para el resto de enfermedades neurodegenerativas”.