La Farmacia de atención primaria quiere avanzar en el consenso sobre los valores óptimos en la indicación de vitamina D en el cuidado de la salud ósea. Así se ha podido ver en el recientemente finalizado 28º Congreso Nacional de la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (Sefap), donde se valoraron aspectos concretos sobre los problemas que puede causar la falta de indicación, tanto en la salud de los pacientes, como en el incremento notable de las pruebas médicas –tanto de las solicitadas en la sanidad pública como de las realizadas en laboratorios privados.
Elena Moreno Charco, farmacéutica de Atención Primaria de la Gerencia de Atención Integrada de Cuenca del Servicio de Salud de Castilla la Mancha, ha recordado la reciente GuiaSalud elaborada por el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud, que recomienda no hacer el cribado en población general sana salvo en pacientes sintomáticos, pacientes con enfermedades crónicas o tratados con fármacos que pueden afectar a la absorción y el metabolismo de la vitamina D, pacientes con hiperparatiroidismo, hipo o hipercalcemia/hiperfosfatemia o con valores inexplicablemente elevados de fosfatasa alcalina, así como cuando exista sospecha de toxicidad por exceso.
El origen de todo ello, según explican desde Sefap es que en los últimos años la vitamina D ha provocado “una fiebre de preocupación y suplementación desmedida, derivada en gran parte de los mensajes alarmistas propagados por las redes sociales” –que hablan de un déficit generalizado– y de la disparidad de criterios médicos, que provocan que no exista un consenso entre las sociedades científicas y los profesionales sanitarios sobre los valores óptimos de esta vitamina esencial para el cuidado de la salud ósea.
“Esto provoca que cuando se toman valores umbrales de 25(OH)D (concentración de vitD determinada en sangre mayores de 30 ng/ml), más del 88% de la población presente niveles bajos. Sin embargo, cuando el umbral aplicado es de 20 ng/ml, la cifra de la población con niveles bajos disminuye al 37%. Y si el umbral es de 10 ng/ml, la prevalencia cae hasta el 7%”, explicó Elena Moreno.
Además señaló que el incremento de las pruebas, añadió la FAP, ha ido asociado a un aumento del consumo de suplementos nutricionales de vitamina D sin supervisión médica, así como de las recetas de vitamina D para el incremento de los niveles de la misma. El pasado 16 de julio, de hecho, el Ministerio de Sanidad publicó una nota de prensa advirtiendo sobre el uso racional de la vitamina D y alertando sobre los riesgos de su consumo sin control médico, ya que el exceso de suplementación puede provocar a corto plazo síntomas como náuseas, vómitos, estreñimiento, pérdida de apetito y debilidad; y a largo plazo puede incluso dañar los riñones, formando cálculos renales, causando insuficiencia renal y afectando también a la salud cardíaca.
En ese sentido, para Elena Moreno Charco, el trabajo de los farmacéuticos de atención primaria es “esencial” para que se cumplan las recomendaciones, asesorando e informando a los equipos de atención primaria, así como en las tareas de educación sanitaria al paciente. Al respecto, la FAP puso como ejemplo el Programa de Revisión de suplementación con vit D puesto en marcha por el SESCAM, por el que todos los FAP de las Gerencias revisan los tratamientos de vitamina D en pacientes sin indicación aparente, con niveles tóxicos (por encima de 50 ng/ml) y con dosis erróneas (superiores a 2000 o inferiores a 400 UI).
La FAP, por último, recordó que en la población general sana basta una ingesta de 600-800 UI diarias de vitamina D para mantenerse en unos niveles adecuados de la vitamina. “Por ejemplo, como 100 gramos de atún a la plancha (1.000 UI) o con 100 gramos de setas (400-800 UI) ya se alcanzarían esas cantidades, aunque también es recomendable exponerse al sol en cara, brazos o piernas, sobre todo en otoño-primavera, durante 5-15 minutos al día, según el tipo de piel, entre las 10:00 y 16:00 horas. Si se va a estar más tiempo al sol, es aconsejable usar fotoprotector para evitar riesgos de cáncer de piel y envejecimiento precoz”, concluyó.












César Hernández, director general de Cartera y Farmacia del Ministerio de Sanidad:
Kilian Sánchez, secretario de Sanidad del PSOE y portavoz de la Comisión de Sanidad del Senado.:
Rocío Hernández, consejera de Salud de Andalucía:
Nicolás González Casares, eurodiputado de Socialistas & Demócratas (S&D - PSOE):
Juan José Pedreño, consejero de Salud de Murcia: