El consumo de benzodiacepinas (BZD) en España es muy superior al de otros países de nuestro entorno con el riesgo de aparición de dependencia, tolerancia, abuso u otros efectos adversos como la pérdida de memoria y de reflejos, confusión y mayor riesgo de caídas y fracturas.
Por este motivo, la Consejería de Sanidad de Madrid se ha propuesto impulsar un plan de deshabituación con el objetivo de disminuir el uso crónico de BZD y de sensibilizar a pacientes y profesionales sanitarios de la importancia de una utilización restringida en el tiempo de estos medicamentos. En este plan, las farmacias comunitarias tienen un cometido especial por su accesibilidad y contacto constante con los pacientes en tratamiento con estos medicamentos.
De este modo, tal y como se recoge en la Estrategia para la reducción del consumo crónico de benzodiacepinas elaborado por la Subdirección General de Farmacia y Productos Sanitarios de Madrid, las farmacias podrán colaborar reforzando la información, detectando efectos adversos y solucionando las dudas que surjan a los pacientes que estén en proceso de reducción de dosis.
Igualmente, se prevé que puedan realizar acciones en otros pacientes que sean candidatos a reducir el uso de BZD, cumplan con los criterios de inclusión y no estén en situación de exclusión. En este caso, las farmacias podrán derivar a pacientes a su médico de familia cuando consideren que hay pacientes que cumplen con los requisitos, así como entregar hojas de información dirigidas a pacientes.
En este sentido, los profesionales sanitarios tienen a su disposición una serie de recursos informativos que pueden ser descargados desde la web de la Consejería de Sanidad y que explica a los pacientes ¿por qué dejar las pastillas para dormir?; también se ofrecen recomendaciones para dormir mejor o para para afrontar el estrés, así como técnicas de relajación.
La actuación de los médicos de familia para dirigir la reducción de dosis requiere la aceptación del paciente y establecer una pauta gradual de reducción de dosis. De este modo, se facilitará un calendario al paciente con la pauta descendiente y un cortador de comprimidos para facilitar su fraccionamiento, según sea necesario.